30 Días de Prueba Amorosa romance Capítulo 377

Cuando Félix se apresuró a salir, vio que Rosaura estaba en el balcón y su cuerpo estaba temblando ligeramente. Fue rodeado de tristeza.

Félix se sintió furioso, quería matar a Camilo. Si no fuera por él, Rosaura no estaría tan triste.

Viendo el triste aspecto de Rosaura, se sintió triste también.

—Rosaura.

Félix se acercó a Rosaura y le acarició suavemente la espalda. Vio que sus ojos estaban rojos y su cara estaba llena de lágrimas.

Durante este tiempo, Rosaura no había vuelto a llorar, Félix sabía que estaba reprimir la verdadera emoción.

La acercó y le apretó la cabeza contra su pecho.

—Llora, todo estará bien.

En el abrazo de su hermano, Rosaura pudo llorar. Liberó todas las emociones reprimidas en su psique.

No se sabía durante cuánto tiempo lloró, los ojos de Rosaura estaban hinchados. Su voz estaba ronca:

—En realidad, no estoy acostumbrada a la vida aquí.

Mucha gente decía que la mejor manera de curar una herida de amor es hacer un viaje. Pero para Rosaura, estar tan lejos de su amado era una tortura. Cuanto más lejos estaba la distancia, echaba más de menos a Camilo.

Félix acarició suavemente la espalda de Rosaura y dijo con dulzura:

—Te acompaño para siempre.

En el viento frío, las dos personas se abrazan.

En la sala, Ana y Blanca miraron a los dos a través de la ventana y hablaron con insatisfacción.

—Si no fuera por su estatus, no habría tomado la iniciativa de ser su amiga, pero no ella no quiere ser amiga con nosotros.

—Era solo una huérfana antes de volver a la familia García —Blanca se burló.

—Voy a esperar hasta el día en que caiga en desgracia.

Ana habló con rabia.

Rosaura estaba tan sumida en el dolor que no sabía que las había ofendido.

Después del banquete, se sintió infeliz todo el tiempo.

Aunque no volvió a sentir la misma tristeza que aquella noche, seguía sin tener interés en nada.

Tanto sus padres como Félix estaban preocupados por ella.

Se reunieron para hacer una reunión.

—Rosaura no puede seguir así, y no se sabe cuándo se recuperará. A mí también se me rompe el corazón al verla así.

Augusto tenía una expresión pesada，

—Necesita tiempo.

Él y Eva no se había peleado nunca, no sabía lo que era perder un amor.

Félix tampoco sabía qué hacer. Todavía no he tenido novia. Miró a Eva:

—Madre, ¿tienes alguna idea?

—Tengo una solución, pero no sé si funcionará.

Augusto y Félix dijeron al unísono:

—¿Qué?

Eva dudó por un momento y dijo:

—¿Todavía recuerdan que cuando Rosaura nació, comprometió con un chico de la familia de Talens?

Augusto asintió,

—Sí.

—No se ha casado durante muchos años, está esperando a Rosaura.

Augusto dijo con desprecio:

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