Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 1028

"No... todavía no. Solo me pregunto qué pasaría si llegará a estar embarazada", explicó rápidamente Qin Lianyi. Se movió un poco incómodamente. Ella estaba un poco avergonzada por la forma en la que él miraba su estómago. "Además, mi período no ha llegado este mes", ella agregó sin convicción.

Él reflexionó: 'Si ese es el caso, es posible que ella esté embarazada. Sin embargo... si está embarazada, entonces yo…'.

"Descubriremos si estás embarazada yendo al hospital mañana para un análisis de sangre", dijo Bai Tingxin.

Cuando escuchó que tenía que ir al hospital para un análisis de sangre, ella sintió un cosquilleo en la cabeza. "No tenemos que ir al hospital para un análisis de sangre, ¿verdad? ¿Por qué no compramos una prueba de embarazo y la hacemos primero?".

Él se quedó sin habla y la miró. "¿Le tienes miedo a las agujas?".

Ella asintió honestamente antes de decir: "Detén el coche y compra una prueba de embarazo cuando pases por alguna farmacia o algo así. Eh, será mejor que compres varias marcas diferentes por si acaso".

Siguiendo sus instrucciones, Bai Tingxin llegó a la farmacia y compró todo tipo de pruebas de embarazo en el estante, la cajera lo miró con extrañeza. La forma en que ella miraba a Bai Tingxin lo hizo sentir como si fuera uno de esos pervertidos de los programas de televisión.

De vuelta en el coche, él le entregó todas las pruebas de embarazo a Qin Lianyi.

Qin Lianyi comenzó a revisar las pruebas de embarazo con todo su corazón y alma. Incluso sacó las instrucciones y las estudió cuidadosamente con una mirada curiosa y emocionada.

Cuando llegaron a la mansión de Bai Tingxin, donde podía hacer las pruebas de embarazo, ella inmediatamente se sintió nerviosa.

"¿Qué hacemos? ¡Bai Tingxin, estoy tan nerviosa!", dijo Qin Lianyi mientras no podía evitar agarrar la mano de Bai Tingxin.

Sin embargo, ella se dio cuenta de la capa de sudor en su palma una vez que tomó su mano. Ella inmediatamente lo miró con sorpresa. "¿Estás… nervioso también?".

"Sí, estoy nervioso", admitió.