Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 1248

Desde anoche hasta esta mañana, ella le había expresado repetidamente que no quería una reducción de embarazo.

Si algo le pasaba a ella, entonces él...

Los ojos de Yi Jinli eran profundos mientras la miraba. "¿Lo has pensado bien?".

"He tomado una decisión", dijo Ling Yiran.

"¿No te arrepentirás del resultado final?", le preguntó.

Ella respondió: "¡No, no lo haré!".

Yi Jinli apretó sus delgados labios. Poco después, miró al panel de doctores. "Si no hacemos la reducción de embarazo e insistimos en mantener a los tres bebés, ¿cuál es la probabilidad de que la madre y los bebés estén a salvo?".

"50%", respondió el panel.

Yi Jinli apretó los labios con más fuerza. ‘Ni... ni siquiera es una probabilidad del 60%’.

Nunca quería hacer nada de lo que no estuviera seguro, pero ahora... "Entonces mantengamos a los bebés primero. Si surge algo peligroso mientras tratamos de mantenerlos a salvo, entonces... salven primero a la madre, ¡pase lo que pase!".

"Pero...". Ling Yiran quería decir algo más, pero Yi Jinli lo interrumpió.

"Yiran, este es mi límite. Si ni siquiera estás dispuesta a aceptar esto, ¡entonces preferiría que me odiaras para siempre!", dijo él con frialdad.

Ling Yiran entendía lo que quería decir. En otras palabras, si ella no estaba de acuerdo, probablemente él haría cualquier cosa para atarla a la mesa de operaciones.

"Sí", respondió Ling Yiran. Se levantó y se dirigió a la puerta de la sala de conferencias, solo para descubrir después de unos pocos pasos que él no la estaba siguiendo.

Se volvió para mirarlo, pero lo encontró de pie a unos metros de ella, mirándola con la misma mirada profunda que antes. De repente, una sonrisa, aparentemente burlona, apareció lentamente en sus labios. Se levantó y se acercó a ella.

Por una fracción de segundo, Ling Yiran sintió como si algo le hubiera golpeado el corazón con fuerza.

Hasta que el coche llegó a la entrada del hospital, ella seguía pensando la forma en que Yi Jinli la miraba y la forma en que le sonreía. De alguna manera ella tenía un doloroso sentimiento en su corazón.

Ya había un miembro del personal esperándolos en el hospital. Yi Jinli dijo: "El personal te llevará a la sala de Qin Lianyi. No voy a subir las escaleras contigo. Llama al chófer cuando hayas terminado, y el conductor vendrá a recogerte".

"Está bien", respondió Ling Yiran mientras seguía al personal hasta la sala de su mejor amiga.