Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 1496

Sin embargo, el Viejo Amo Yi estaba equivocado. ¡El Joven Amo Yi estaba dispuesto a arriesgar su vida por Ling Yiran!

Yi Jinli pudo ver el temporizador de cuenta regresiva al llegar al dispositivo. Solo quedaban ocho minutos.

Ling Yiran gritó: "¡Jin, no! Pensemos en otra manera. ¡El Viejo Amo Yi no habría apostado por algo tan simple! ¿No se preocupaba más el Viejo Amo Yi por la familia Yi? Si mueres, la familia Yi también será destruida! ¡El Viejo Amo Yi jamás permitiría que eso sucediera!”.

"Yiran, no tengas miedo. ¡Dije que te salvaría!", dijo Yi Jinli y presionó el botón verde.

Al instante, sonó la voz del Viejo Amo Yi.

"Jinli, mi... Ejem, Ejem… Mi nieto. Parece que vas a salvar a Ling Yiran con tu vida. ¡Pero te darás cuenta de que no vale la pena salvar a esta mujer en absoluto! Para desactivar las bombas, necesitas usar la huella de tu pulgar, y debes mantenerla presionada hasta que sea el momento de que las bombas exploten. Pero, al mismo tiempo, el dispositivo explotará y con eso, te matará".

La voz del Viejo Amo Yi se elevó en el aire e hizo que todos los que lo escucharan sintieran un escalofrío en sus corazones.

El hombre que una vez fue la figura más poderosa de la Ciudad de Shen estaba siendo despiadado con su nieto incluso después de su muerte.

"Sin embargo, puedes alejarte en cualquier momento después de presionar el botón de desarme con el pulgar. Pero si el desarme falla, las bombas del otro lado se activarán. ¿Por qué no vemos cuánto... Ejem, ejem.. vemos cuánto amas a esta mujer y... si esta mujer vale tu vida…?".

La grabación del Viejo Amo terminó, y solo quedó el silencio.

Ling Yiran solo podía sentir cómo su cuerpo temblaba. ¡¿Cómo podría el Viejo Amo... ser tan cruel con su nieto?!

¿Por qué…? ¿Por qué?

Yi Jinli se puso en cuclillas y presionó el dispositivo con el pulgar, lo que demostró que estaba dispuesto a arriesgar su vida.

Ling Yiran abrió la boca para pedirle a Yi Jinli que se fuera, pero todas las palabras parecieron atascarse en su garganta.

A pesar de que estaba en cuclillas, sus ojos todavía la miraban como si quisiera plasmar cada pulgada de ella en su corazón.

En ese momento, ella supo que él había tomado una decisión. ¡Estaba decidido a intercambiar su vida por la de ella!

¡Él no se iría sin importar cuánto intentara convencerlo!

"Yiran, lamento haberte hecho pasar por tanto dolor y haberte arrastrado a este peligro. No tienes que sentirte culpable por nada. Solo considéralo como una compensación por lo que te hice en el pasado. Ya no importa si me perdonas o no". Él solo quería que ella viviera.