Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 1517

"Lo sé, lo vi en las noticias", dijo Ling Yiran. Se mordió el labio y continuó: "Si Jin realmente le ha dado todo su amor a esa persona y ya no siente nada por mí, no lo molestaré más. Pero… si la persona que ama Jin sigo siendo yo, ¡no lo dejaré!”.

Todo el mundo pensaba que estaba muerta. Era perfectamente razonable que Jin se enamorara de otra persona o se volviera a casar.

Sin embargo, tenía la inexplicable sensación de que su Jin se sentía como ella. Su corazón nunca latiría por otra persona que no fuera ella.

Durante los últimos años, mientras no tenía sus recuerdos, se había topado con algunos hombres destacados que se sentían atraídos por ella, pero ella nunca pudo sentir nada por ellos.

Fue solo después de que sus recuerdos regresaron gradualmente que se dio cuenta de que su corazón se había entregado por completo a un hombre llamado Yi Jinli. Por esa razón, ella ya no podía sentir por nadie más.

"Bien, ¿qué hay de ti? ¿Tienes pareja ahora?". Ling Yiran cambió de tema.

"¿Yo? ¡Aún no! Todavía soy una mujer soltera. Mi madre me está molestando con esto todo el tiempo". Qin Lianyi se encogió de hombros con una sonrisa teñida de amargura.

En los últimos años, había intentado no pensar en Bai Tingxin, pero el hombre siempre aparecía fugazmente en su cabeza. Tal vez era porque había sido muy feliz durante su relación con aquel hombre. Ahora, ella no tenía la necesidad de enamorarse sin importar qué tipo de hombres conociera. Había tenido citas a ciegas, pero siempre fracasaban.

"¿Todavía no lo has olvidado?". Ling Yiran miró a su buena amiga, sintiendo pena por ella.

"Me estoy esforzando mucho". Qin Lianyi sonrió. "Si realmente no puedo olvidarlo, solo estaré soltera durante toda mi vida. No es tan aterrador. De todos modos, tengo a tus dos hijos para que me despidan cuando muera".

Qin Lianyi se detuvo abruptamente después de decir esto. Se volvió hacia Ling Yiran con una mirada de disculpa.

Ling Yiran corrió hacia su hija y la ayudó a levantarse.

Qin Lianyi hizo lo mismo. Mostrándose llena de preocupación, le preguntó: "¿Estás bien?".

La Pequeña Jin sacudió la cabeza con sus ojos almendrados llenos de lágrimas. “Mami, las fotos de papá están rotas. Ella trató de quitármelas”.

¡Fue solo entonces cuando Ling Yiran descubrió que su hija sostenía la mitad de la foto espontánea de Yi Jinli que ella había comprado a un alto precio!

En cuanto a quien intentó quitársela… Levantó la mirada, ¡y qué coincidencia! ¡Eran el dúo de madre e hija Su del que Qin Lianyi le había hablado hace un momento!