Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 1703

"¿Quién sabe? Hay todo tipo de personas raras hoy en día. También he escuchado que algunas personas adoptan niños con ciertas fechas de nacimiento para usarlos como amuleto y alejar los malos espíritus de sus hogares", dijo Qin Lianyi mientras fruncía los labios.

Ling Yiran apretó los labios, aparentemente pensando en algo.

En ese momento, la niña volvió corriendo. Esta vez sin mochila, pero con una pequeña cangurera. Tomó la mano del niño y le dijo a Ling Yiran: "Tía Ling, estoy lista para acompañar a Ci al hospital".

Ling Yiran sonrió. "Está bien, vamos".

Qin Lianyi se encogió de hombros y condujo el coche hacía ellos. Se subieron al coche y Ling Yiran le preguntó a la niña: "¿Le dijiste a tus padres a dónde iríamos?".

"Dejé una nota", dijo He Zixin. Sin embargo, sabía que no tenía sentido hacer eso. Incluso si ella y Ci desaparecieran por toda una noche, a su padre no le importaría, y mucho menos a su madrastra.

Su madrastra deseaba que ella y Ci desaparecieran.

Se dirigieron al hospital. Ling Yiran vio la pequeña mano de He Zixin sosteniendo con fuerza la mano del Pequeño Ci, como si estos dos niños solo se tuvieran el uno al otro en este mundo.

Cuando llegaron al hospital, Ling Yiran registró al Pequeño Ci y le encontró un especialista para atenderlo. Ling Yiran jadeó cuando el pequeño se quitó la ropa frente al doctor. Incluso Qin Lianyi se sorprendió.

Los moretones eran peores de lo que parecían cuando tenía la ropa puesta. El doctor dijo con el ceño fruncido: "¿Qué les pasa a ustedes sus mayores? Esto es casi un abuso. ¿Cómo pueden golpear a un niño así?".

Ling Yiran no dio explicaciones, pero le preguntó al doctor si sus moretones eran graves.

Ling Yiran miró al pequeño, que permanecía en silencio. Era como si no le importaran estos asuntos. Resultaba que la razón por la que dijo que no le dolía era porque era menos sensible al dolor que la gente común.

Sin embargo, Ling Yiran no consideraba esto algo bueno. Después de todo, las personas tienen el instinto de defenderse cuando sienten dolor.

Si el Pequeño Ci era mucho menos sensible al dolor, no pensaría que podría tener una lesión cuando su cuerpo resultara gravemente herido.

"Señor Doctor, ¿está bien mi hermano? ¿Cuándo se recuperará?", preguntó He Zixin.

"Son solo heridas superficiales. Sus huesos no están heridos, así que solo necesita aplicar un poco de ungüento sobre sus moretones", dijo el doctor. Luego, le dijo a Ling Yiran: "Ustedes, las personas responsables, ya no pueden golpearlo así. Él simplemente es menos sensible al dolor y no lo sabe, ¡pero ustedes, los adultos, deben ser más conscientes!".