Gu Lichen miró a Yi Jinli con indiferencia. "¿Sospechas que jugué un papel en esto?".
"Sé que no estás involucrado. Solo quiero saber por qué estabas allí", dijo Yi Jinli.
Gu Lichen frunció sus delgados labios. Incluso si no le decía a Yi Jinli la razón en ese momento, tendría que decírselo a la policía más tarde, y Yi Jinli igual se enteraría eventualmente.
"Un miembro del equipo de la compañía de cine y televisión del Grupo Gu solicitó pólvora, pero la cantidad superaba con creces lo que se necesitaba. Casualmente, hice que alguien revisara esto, solo para terminar rastreándolo hasta algunas personas que son grandes fanáticos de Hao Yimeng. Eventualmente, descubrí que Hao Yimeng también estaba envuelta. Iba a esperar hasta tener el paradero exacto de Hao Yimeng para informar a la policía, pero no esperaba que...".
"No esperabas que los planes de Hao Yimeng sobrepasaran tus expectativas, ¿verdad?", preguntó Yi Jinli sarcásticamente.
Gu Lichen apretó los labios y no dijo nada. Sabía que los explosivos habían sido llevados colina arriba, y se preguntó qué quería hacer Hao Yimeng con ellos. Por lo tanto, subió en secreto a la montaña, solo para encontrarse con Hao Yimeng, Xiao Ziqi y el Pequeño Ci.
¡Al escuchar su conversación, descubrió que el Pequeño Ci era el hijo que Yiran y Yi Jinli aún no habían encontrado!
Había planeado esperar la mejor oportunidad para rescatar al Pequeño Ci, pero todo cambió tan rápido que lo tomó por sorpresa. ¡No esperaba que Hao Yimeng incluso tuviera a Xiao Ziqi incluido en su complot!
"Admito que salvaste a Yiran y al Pequeño Ci hoy. ¡Así que te devolveré el favor!". La fría voz de Yi Jinli continuó sonando.
Gu Lichen de repente se rio entre dientes. "¡No tienes que devolverme el favor por salvar a Yiran y al Pequeño Ci!". Además, Yiran ya lo había hecho.
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