Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 1875

Ella respondió en un murmullo: "Sí, no podría soportar hacerlo".

La sopa de ternera con verduras estuvo lista al poco tiempo. Se sentaron en la mesa del comedor, Yi Jinli tomó los palillos y las cucharas y empezaron a comer.

"Jin, ¿confías en mí?", preguntó Ling Yiran de repente.

"Mientras no hagas nada para traicionarme, siempre confiaré en ti", dijo Yi Jinli.

Las manos de Ling Yiran se apretaron mientras sostenía los palillos. "¿Qué pasaría si... tengo que traicionarte algún día? Si suceden muchas cosas que hagan que te traicione sin darme cuenta, ¿acaso me… ?" Ella apretó los labios y dijo con dificultad: "¿Me perdonarías?".

"¿Y si no te perdono?". Él pareció preguntar eso de forma casual mientras continuaba bebiendo la sopa de carne y verduras que ella preparó.

A ella se le aflojaron los dedos instantáneamente, y los palillos en su mano cayeron sobre la mesa.

Él miró los palillos y luego su rostro. "¿Qué pasa? ¿Te sorprende oírme decir eso?".

'Sorprendida... Sí, estoy sorprendida’. Ling Yiran solo asintió.

Yi Jinli dijo: "Cualquiera en este mundo puede traicionarme. Congming, el Tío Kwan, incluso el Pequeño Mo y los otros niños. Pero tú no, Yiran. Eres la única persona que no puede traicionarme".

Ling Yiran quedó atónita al instante, sin imaginarse escucharlo decir tal cosa.

"Soy la única... ¿qué no puede?", ella murmuró.

La luz de la luna brillaba a través de la ventana sobre él, y su rostro durmiente se veía tan pacífico, pero los ojos de Ling Yiran se fijaron en la cicatriz debajo de su ropa.

Ella abrió suavemente el cuello de su bata y miró la cicatriz en silencio. Su madre se la había hecho en el pasado. ¿Tal vez le estaba haciendo otra ahora?

Ella se inclinó y besó su cicatriz con los labios.

"Jin, lo siento…", ella murmuró y se levantó para irse, sin notar los dedos a su lado temblando ligeramente.

...

Ling Yiran salió de la Residencia Yi sin obstáculos. Los guardias de seguridad del turno nocturno no le dirían nada a su señora aunque vieran algo extraño.