Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 1927

Ling Yiran se congeló y se dio cuenta de que la mujer de la que estaba hablando era la 'Señora Kang' de antes de ser desfigurada.

Había visto una foto de su madre cuando era joven y el Pequeño Ci se parecía a ella. Él podría parecerse aún más a ella en unos años.

"Jin, el Pequeño Ci es nuestro hijo sin importar cuánto odies a la Señora Kang. No...", Ling Yiran hizo una pausa como si estuviera eligiendo qué decir.

Yi Jinli la ignoró y dijo: "No te preocupes, no voy a desahogar mi enojo con nuestros hijos. el Pequeño Ci es el niño que luchaste tanto para encontrar. Los tres niños son preciosos para mí".

Ling Yiran se sintió aliviada al escuchar eso. Dudó por un momento antes de decir: "Mi mentor y su esposa vieron las noticias y llamaron para preguntar al respecto. La Señora Kang incluso quiere volver a la Ciudad de Shen para verte, sin importarle lo que pueda pasarle a ella. Jin, creo que no hay un día en el que la Señora Kang no se arrepienta. Tal vez quiera compensar sus errores con su vida".

"Incluso si ella muere, no puede compensarlo". La voz de Yi Jinli de repente se había vuelto fría.

Ling Yiran sabía que algunas cosas en este mundo no podían remediarse. No importa que tan miserable se sintiera la Señora Kang, no podía deshacer ese error.

Ella sabía que a él no le gustaba hablar de la Señora Kang, pero aún necesitaba cerrar lo que había sucedido entre él y su madre.

"Jin, ¿qué le vas a hacer a la Señora Kang?", preguntó Ling Yiran nerviosamente mientras sus manos agarraban el dobladillo de su bata de hospital. Si él quería matar a la Señora Kang, entonces ella...

"Asegúrate de que ella nunca vuelva a poner un pie en la Ciudad de Shen por el resto de su vida", dijo lentamente Yi Jinli.

Ling Yiran lo miró con una mirada de sorpresa en su rostro. '¿Eso significa que…? ¿Él va...?'.

"¿Va... vas a dejar ir a la Señora Kang?", preguntó con sorpresa, su voz temblando ligeramente.

Yi Jinli dijo: "Solo puedo decir que la mujer tiene suerte. Fue amable contigo y con la Pequeña Jin, por eso su amabilidad le salvó la vida. ¡Pero nunca deberías volver a mencionar a tu mentor y a esa mujer frente a mí!".

Ling Yiran asintió solemnemente.

"Está bien, entonces está decidido. Sonríe, Yiran. Quiero verte sonreír". Él quería ver su sonrisa, no su rostro triste.

Ling Yiran se secó las lágrimas y sonrió. Tomó la iniciativa de besar a Yi Jinli en los labios. "Jin, eres... ¡el hombre que más me ama!".

Él aceptó su beso y puso sus manos tiernamente alrededor de la cintura de ella. Tal vez habrían hecho algo si no estuvieran heridos.

Cuando terminó, Yi Jinli dijo con voz ronca: "Yiran, también eres la mujer que más me ama".