Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 193

Cuando los tiempos eran buenos en ese entonces, ella se quejaba todos los días sobre querer perder peso, temiendo engordar y no verse bien con cierta ropa.

Ya no tenía que preocuparse por esto. Ahora estaba delgada, y ya no tendría que preocuparse por si se veía bien con cierta ropa o no. Lo que consideraría ahora era el precio y la practicidad de la ropa, así como si era duradera o no.

Por eso, cuando pensaba en ello a veces, era realmente gracioso.

Cuando uno quiere algo, uno se esfuerza desesperadamente por conseguirlo. Cuando finalmente lo obtienes, te das cuenta de que las cosas que antes deseabas desesperadamente ya no eran las cosas que deseabas actualmente.

Ling Yiran se río en autocrítica. Al hablar de esto, realmente no podía entender por qué Yi Jinli todavía la llamaba "hermana" cada vez que abría la boca. Era como si todavía la quisiera y extrañara el período de tiempo que estuvieron juntos.

¿Estaba él interesado en ella?

A veces, sus acciones mostraban que gustaba mucho de ella, pero no podía resistirse a pensar: ‘¿Será esto una actuación también?’

Ling Yiran negó con la cabeza y dejó de pensar en esto. Ella solo podía dar un paso a la vez en ese momento de todos modos.

Después de un baño apresurado, salió del baño solo para notar que él ya estaba sentado en la cama en el piso. Al igual que antes, esperó a que ella le diera las buenas noches antes de irse a dormir.

Se acercó y dijo incómodamente: “Buenas noches”. Después de decir esto, ella se apresuró a meterse en la cama y se escondió entre las mantas.

En ese momento, ella solo quería quedarse dormida rápidamente para poder terminar esta noche lo antes posible.

Sin embargo, antes de que cerrara los ojos, él se inclinó y se acercó a ella para decirle: “Hermana, parece que no has dicho mi nombre ni una vez en toda la noche. Quiero escucharte decir mi nombre”.

Su garganta se apretó. En ese momento, si ella se volteara para darle la espalda, ese acto también sería demasiado deliberado.

Sin embargo, si ella lo encaraba…

“¿Qué pasa? ¿No acordamos antes en que esta noche sería como en el pasado?” preguntó él.

Ling Yiran se mordió el labio inferior. En ese entonces, él era el único que actuaba. Ahora, ¿quería que se convirtiera en un espectáculo de dos personas?

Ling Yiran sintió que la estaba provocando.

¿Paz mental?

Ella no podía sentir ninguna paz mental debido a su presencia ahí.

Finalmente, después de que ella le dio unas palmaditas en la cabeza, Yi Jinli volvió a ponerse las sábanas y alcanzó las luces.

“¡No la apagues!” dijo Ling Yiran. Cuando se encontró con su mirada inquisitiva, dijo un poco incómoda: “Si lo apagas, temo que… no podré dormir”.

Él lo miró pensativo por un momento, luego sonrió. “Bien entonces. Dejaré las luces encendidas”.

Ella exhaló un suspiro de alivio, se acostó y cerró los ojos. Después de que pasó una cantidad de tiempo desconocida, su voz sonó una vez más. “Hermana, ¿alguna vez has odiado a alguien?”