Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 2006

Ling Yiran y Qin Lianyi fueron a la tienda de Zhuo Qianyun.

El negocio estaba bastante lento alrededor de las dos de la tarde. Zhuo Qianyun estaba feliz de ver a Qin Lianyi tan feliz.

Los buenos tiempos finalmente estaban comenzando para Lianyi ahora que terminaron sus tiempos difíciles. Ella no terminaría de la misma manera.

Zhuo Qianyun dijo: "Tendrás más responsabilidades cuando nazca tu bebé. Ahora que tú y Bai Tingxin están juntos de nuevo, ¿dónde vas a vivir cuando te cases?".

"Principalmente en la Ciudad de Shen, supongo. Tingxin dijo que mis padres están acostumbrados a vivir en la Ciudad de Shen, por lo que probablemente no se acostumbren a la Ciudad J si hacemos que se muden allí. Si me separo de mis padres, me preocupa que ellos me extrañen demasiado. Así que él dijo que el Grupo Bai Feng establecerá otra sede aquí en la Ciudad de Shen cuando llegue el momento", dijo Qin Lianyi.

Zhuo Qianyun dijo: "Bai Tingxin realmente se preocupa por ti. Tú y Yiran están bien. Estoy feliz por ustedes dos".

"Hermana Zhuo, siempre estás feliz por nosotros. ¿Alguna vez has pensado en ti?", dijo Qin Lianyi.

"¿Yo?". Zhuo Qianyun hizo una pausa.

"Siempre has dicho que te quedarás con el Pequeño Yan y esta tienda. A tu tienda le está yendo bien ahora, pero los costos de vida solo aumentarán a medida que el Pequeño Yan crezca. La tía también está envejeciendo. Los gastos médicos y otras cosas costarán mucho si se enferma", dijo Qin Lianyi.

Los ojos de Zhuo Qianyun se volvieron deprimidos. Había pensado en lo que dijo Qin Lianyi, pero había muy poco que pudiera hacer. La vida tranquila que tenía ahora ya era un lujo para ella.

"Hermana Zhuo, ¿has pensado en tener otros negocios? Por ejemplo, puedes abrir un restaurante o algo así. Lianyi y yo podemos invertir en eso. Estarías a cargo de administrarlo. Serías accionista con tus habilidades. Si el negocio va bien, lo convertiremos en una cadena. Es mejor que abrir una tienda".

Ling Yiran y Qin Lianyi la siguieron a la escuela.

Cuando llegaron a la oficina de disciplina, vieron que la cremallera del uniforme de Zhuo Yan estaba rota y tenía una manga rota. Su cuerpo estaba cubierto de tierra en muchos lugares, su cara estaba roja e hinchada y sus labios estaban heridos.

Zhuo Qianyun rápidamente corrió hacia adelante mientras miraba a su hijo con angustia. "¿Qué pasó? ¿Cómo te metiste en una pelea?".

Sin embargo, el Pequeño Yan no dijo nada. Solo bajó la cabeza. Parecía ansioso mientras las manos a sus costados agarraban el sucio dobladillo de su camisa.

Zhuo Qianyun se detuvo un momento. "Pequeño Yan, ¿qué pasa? Dime qué pasó".