Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 2016

"Está bien", dijo Shen Weifang y terminó la llamada telefónica. Abrió la puerta del coche para salir y caminó hacia la pequeña figura que estaba entre la multitud.

Cuando Shen Weifang se acercó a su hijo y a la mujer que lo ayudó a hacer la llamada telefónica, la mujer se sorprendió como si no hubiera esperado que el padre viniera tan rápido. Él era tan... guapo.

"Gracias. Vine a recoger a mi hijo", le dijo Shen Weifang a la mujer.

"Tú... De nada". La mujer se sonrojó un poco.

Shen Weifang tomó la mano de Hao Jifei y dijo: "Vámonos".

El pequeño siguió obedientemente a su padre hasta el coche que estaba estacionado cerca.

Una vez que subieron al coche, Shen Weifang pareció decir con indiferencia: "¿Qué pasa? ¿Decidiste regresar a la Ciudad Venado conmigo?".

El pequeño sacudió la cabeza. "Yo... quiero pedirte prestado algo de dinero".

"¿Dinero prestado?". Parecía haber oído un chiste gracioso. "¿Me estás pidiendo que te preste dinero?".

"Sí", respondió el pequeño incómodamente. Sus dientes blancos como perlas estaban mordiendo su labio.

Shen Weifang lo miró fijamente. "Si me pides que te preste dinero, ¿cómo me lo vas a devolver?".

La vergüenza apareció en el rostro de Hao Jifei. 'Sí, ¿cómo voy a devolverle el dinero? ¡No puedo ganar dinero en absoluto!’.

Incluso si quisiera ganar dinero como músico callejero, ¡no tenía piano!

El pequeño bajó la cabeza y se quedó en silencio.

"Está bien, has estado fuera por suficiente tiempo. Te llevaré de vuelta. De lo contrario, la maestra de jardín de infantes se preocupará", dijo Shen Weifang antes de ordenarle al conductor que condujera hasta el jardín de infantes.

Cuando Hao Jifei regresó al jardín de infantes, la maestra no lo encontraba por ninguna parte y estaba revisando las imágenes de vigilancia.

Tan pronto Yi Qianjin lo vio regresar, corrió hacia él y lo abrazó. "Pequeño Fei, ¿por qué saliste? ¿La maestra no dijo que no podíamos salir solos? Seremos secuestrados por malas personas".

"Yo...". Hao Jifei guardó silencio, demasiado avergonzado para decir que quería ver qué regalos podía comprarle. Sin embargo, todos costaban mucho dinero y él no tenía ni un centavo.

En ese momento, Yi Qianjin notó a Shen Weifang. "Gracias por traer de vuelta al Pequeño Fei, Tío".