Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 2163

El rostro de Ling Yiran se volvió cada vez más serio. Después de todo, el Pequeño Fei diciendo mentiras era lo último que quería ver.

"Pero nada es absoluto. Haré que alguien revise la casa para ver si hay algo que pueda haber producido el sonido. Tal vez no nos dimos cuenta", dijo Qin Lianyi.

"¿Nosotras tres y el Pequeño Yan no nos dimos cuenta?". Ling Yiran pensaba que las probabilidades eran escasas.

Qin Lianyi se rio secamente. "Está bien, sé que no quieres que el Pequeño Fei sea acusado erróneamente. Pero, ¿y si empujó al Pequeño Yan a propósito? Tal vez no estaba tratando de empujar al Pequeño Yan por las escaleras, sino solo de asustarlo. ¡Después de todo, la mayoría de las veces, los niños hacen bromas sin pensar en las consecuencias!".

Ling Yiran suspiró. Si el Pequeño Fei lo hizo y el 'sonido' fue solo una mentira que inventó, tal vez era mejor darle al Pequeño Fei a Shen Weifang como había dicho Jin.

...

Por la noche, Hao Jifei yacía acurrucado en la cama. La Pequeña Jin no había hablado con él durante dos días. A pesar de que comía en la misma mesa que ella como de costumbre, la Pequeña Jin no le prestaba atención.

Todos los sirvientes de la casa vieron esto, por supuesto. También lo ignoraron. Solían regañar y detener a sus hijos cuando los veían intimidándolo.

Sin embargo, ahora fingían no verlo.

Había mucha discusión de que él había empujado a Zhuo Yan por las escaleras de la residencia.

Los hijos de los sirvientes comenzaron a insultarlo a sus espaldas, diciéndole que se fuera de la residencia.

'Pequeña Jin, ella... ¿También me ha abandonado? ¿Ya no me quiere?’.

¡Hao Jifei se escondió debajo de las sábanas, sintiéndose tan frío!

Extrañaba a la Pequeña Jin compartiendo cama con él y contándole historias.

Él había estado practicando el piano en estos días, solo queriendo mejorar y tocar canciones más complicadas para que pudiera gustarle aún más a ella. Él se sentiría satisfecho mientras ella le sonriera.

Yi Qianjin replicó: "El Hermano Yan estaba usando su aparato auditivo ese día. ¡Podía oír! Pequeño Fei, te niegas a admitir tu error e incluso estás diciendo mentiras. ¡Te odio!".

Dicho esto, ella se dio la vuelta y se fue corriendo, dejando a Hao Jifei todavía parado allí solo.

'¿Ella... me odia?'.

Él se sintió tan triste de repente.

'¿Qué me queda si hasta ella me odia?'.

Yi Qianmo estaba parado cerca, con sus ojos de flor de durazno que eran similares a los de Yi Jinli mirando fijamente a Hao Jifei. Parecía estar pensando en algo.

Durante todo el día en el jardín de infantes, la mente de Hao Jifei estaba distraída mientras recordaba a Yi Qianjin diciéndole: "¡Te odio!".