Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 2199

Qi Yueyun miró a su hijo con burla y dijo: "Si voy a prisión, no seré la única humillada, sino que la familia Bai y el Grupo Bai Feng también serán humillados. Las acciones del Grupo Bai Feng caerán en picado y los accionistas sufrirán grandes pérdidas. ¿Crees que podrás seguir siendo presidente?”.

Qi Yueyun había pensado en una salida para ella en tan poco tiempo.

"Solo puedes dejar pasar esto. ¡De ahora en adelante, viviré mis días aquí, mientras que tú puedes vivir los tuyos en la Residencia Bai!", dijo Qi Yueyun.

Bai Tingxin sonrió levemente. "Sí, vivirás tu vida aquí, ¡pero nunca podrás salir de este lugar!".

Qi Yueyun se congeló. "¿Qué quieres decir? ¿Me vas a encerrar aquí? ¿Vas a encerrar a tu propia madre?".

"Puedes llamarlo 'encerrarte'. Pasarás el resto de tu vida en este viejo castillo. Alguien te cuidará, pero puedes olvidarte de la vida de lujo que quieres", dijo Bai Tingxin.

Qi Yueyun inmediatamente dijo con furia: "¿Qué derecho tienes para encerrarme? ¡Puedo irme cuando quiera y no dejaré que me encierres!".

"Entonces los detalles del crimen que cometiste serán enviados a la policía tan pronto pongas un pie fuera de este viejo castillo. Aunque estés en un país extranjero, podemos recurrir a la extradición. En ese caso, tendrás que pasar el resto de tu vida en prisión. Puedes elegir entre estas dos opciones", dijo Bai Tingxin.

La cara de Qi Yueyun estaba llena de incredulidad. "No... No harías eso. No te haría ningún bien ni a ti ni a la compañía. Incluso haría que la compañía sufra grandes pérdidas. ¡Tú y la familia Bai serían humillados!".

Bai Tingxin dijo con firmeza: "¡Lo haré! No solo soy el patriarca de la familia Bai, sino también el esposo de Lianyi y el padre de mi hija. ¡Debería obtener justicia para ellas! Si no me crees, ¡puedes intentar salir del viejo castillo y ver si cumplo mi palabra!".

No había vacilación en su voz fría, y no había emoción en sus ojos mientras la miraba.

Era como si su afecto por ella se hubiera agotado después de tantos incidentes.

En su opinión, su madre había muerto hace mucho tiempo cuando prefirió destruir su felicidad por dinero y poder. Ella estaba muerta para él...

...

Por alguna razón, el corazón de Qin Lianyi empezó a latir violentamente de repente. Tenía un sentimiento persistente en su corazón.

Después de pensarlo, le envió un mensaje de texto a Bai Tingxin.

Qin Lianyi: [¿Cómo están las cosas allá? ¿Cuándo vendrás a casa?].

Su teléfono pronto sonó. Era una llamada de Bai Tingxin.