Resumo de Capítulo 2243 – Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante por Internet
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Sin embargo, ¡Ye Wenming ahora estaba donando 400 ml de sangre cada mes!
"¿Te das cuenta de que tu cuerpo no podrá soportarlo si sigues haciendo esto?". Ella lo fulminó con la mirada, sintiendo una oleada de ira subiendo por su pecho.
¡Ni siquiera sabía por qué estaba enojada!
¿Estaba enojada porque él le estaba donando su sangre sin decírselo? ¿Estaba enojada porque él no apreciaba su propio cuerpo? Quizás era otra cosa...
"¿Y qué?", preguntó él con indiferencia mientras la miraba con gentileza. "Qianyun, esto es todo lo que puedo hacer por ti. Sé que es difícil que confíes en mí en este momento, pero... más que nadie, yo quiero que este bebé esté a salvo. Y quiero asegurarme de que tengas todo lo que necesites".
Hizo una pausa de nuevo. "Son solo 400 ml cada mes. No es gran cosa. Cuidaré bien mi cuerpo y lo apreciaré".
Además de su sangre, también tenía su hígado... Su hígado también era importante.
¡Si la condición de ella empeorara, podría devolverle el hígado y dejar que los doctores le hicieran un segundo trasplante de hígado!
¡Por lo tanto, él cuidaría mejor su salud durante este período que cualquier otra persona!
"Tú...". La nariz de Zhuo Qianyun de repente le hormigueo, y el dolor se extendió desde la punta de la nariz hasta su pecho y luego a sus extremidades.
Incluso sus ojos se pusieron rojos. Sentía que estaba a punto de llorar.
"Está bien, te he dado todas las respuestas que querías. ¿Eso es todo?", él dijo.
Al mismo tiempo, se dijo a sí misma que esto debía ser todo. Ella no quería que le extrajeran sangre porque no quería deberle ningún favor.
Ye Wenming sonrió pero saboreó la amargura en su boca. "No te preocupes. No me deberás nada. Soy yo quien te debe, ¡y no lo hago porque me siento culpable!".
Él no se dejaría morir si solo fuera por culpa.
Solo estaba dispuesto a hacer esto porque la amaba.
"Aún así no puedes extraerte sangre una vez al mes. ¡No necesito que me dones sangre! ¿Dónde está el doctor que accedió a que te extrajeran sangre una vez al mes? ¡Iré a buscarlo!", dijo Zhuo Qianyun.
Justo cuando estaba a punto de interrogar a la enfermera a cargo de las bolsas de sangre, Ye Wenming tiró de su brazo. "¡No vayas!".
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