Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 2486

Su Zhehan de repente jadeó. Incluso si Xia Xi no continuaba, podría adivinarlo.

"Ella hizo que alguien me cortara el dedo. Lo tiró junto con el anillo por el inodoro. Me dijo: 'Xia Xi, ¡nunca podrás usar otro anillo de bodas!'". La sonrisa en sus labios se hizo más amplia mientras sus ojos estaban llenos de sarcasmo.

Su Zhehan de repente sintió una fuerte opresión en el pecho. 'Entonces, así es... ¡cómo ella perdió su dedo!'.

¡Él no sabía eso!

Él parecía estar lleno de ira y culpa. Estaba enojado de que Xia Huan le hiciera algo así a su hermana biológica, y se sintió culpable porque pudo haberla salvado en ese entonces.

Lo habría descubierto si hubiera investigado cuidadosamente. Sin embargo, deliberadamente les dijo a las personas a su alrededor que no la mencionaran frente a él.

Aunque la odiaba por que ella lo había traicionado y por convertirlo en el hazmerreír de la ciudad, nunca tuvo la intención de que ella terminara de esta manera.

Xia Xi puso su mano frente a Su Zhehan como para que lo viera con más claridad.

"¿Aún crees que debería decirles a todos que tengo una enfermedad mental y que me merezco esto? ¿Crees que la familia Xia no me agravio y que mi buena hermana hizo todo lo que pudo para encontrar un doctor que tratara mi enfermedad y así finalmente recuperarme?”, ella preguntó.

Su Zhehan no podía decir una palabra. La mano derecha de ella parecía cien o incluso mil veces más evidente que antes.

"Su Zhehan, no quiero dinero. ¡Todo lo que quiero es justicia! ¡Quiero justicia incluso si tengo que romperme los huesos por ello!", dijo Xia Xi cada palabra con gran facilidad.

Él apenas podía apartar los ojos de ella.

Recordó que ella le había dicho con una sonrisa: “Su Zhehan, no quiero dinero. Solo quiero que estemos juntos para siempre. ¿Puedes hacer eso?".

"La familia Yi solo es poderosa en la Ciudad de Shen. No tienen poder en la Ciudad Venado", dijo Xia Huan.

En ese momento, de repente hubo un estruendo. Alguien abrió la puerta de una patada e irrumpió en la habitación.

Xia Huan estaba a punto de perder los estribos, pero se congeló cuando vio que Su Zhehan se veía malhumorado. "Zhehan, ¿qué te pasó?".

"¿Le cortaste el dedo a Xia Xi porque llevaba el anillo de diamantes que le regalé para nuestra boda?", preguntó Su Zhehan bruscamente.

"Yo... yo...". Xia Huan estaba asombrada, sin esperar que Su Zhehan le preguntara eso. "Zhehan, ¿acaso Xia Xi te dijo alguna tontería? Ella perdió su dedo cuando se lastimó a sí misma. ¡No tiene nada que ver conmigo!".

"¿No tiene nada que ver contigo?". La expresión de Su Zhehan era gélida. "Dime otra vez a la cara que no tiene nada que ver contigo".