Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 2687

¿Por qué Gu Lichen se acercó a Zhong Keke? Si él quería perder su tiempo, muchas mujeres en la industria del entretenimiento estaban dispuestas a agradarle.

Además, según la información que vio, Gu Lichen no era un hombre al que le gustara perder el propio tiempo.

Los ojos de Zhou Xinmian se abrieron después de que apareció Gu Lichen. Pensó: “Dios, ¿es este... el príncipe heredero de la industria del entretenimiento? Muchas personas ni siquiera tuvieron la oportunidad de verlo, pero él se había presentado frente a ella. ¡Él estaba tan cerca!”.

Zhou Xinmian habría gritado si no estuviera en una sala de hospital.

Zhong Keke, que estaba sentado en la cama del hospital, vio a Gu Lichen caminando hacia ella. Su figura se agrandó gradualmente en sus ojos.

—Lamento haberlos enviado tarde —Gu Lichen miró los moretones en su rostro y la tristeza se apoderó de sus ojos al recordar el informe de Qiao Yumei.

Zhong Keke negó con la cabeza ligeramente. “Entonces, él es quien me salvó. ¡Envió al Asistente Qiao al set!”.

Los ojos de Gu Lichen brillaron y quitó las manos de Yan Luochu de los hombros de Zhong Keke.

—Señor Yan, Keke es mi novia. Quiero que vigiles tu comportamiento en el futuro.

—¿Qué diablos quieres con Keke? —Yan Luochu preguntó. Sabía que el hombre que tenía delante no era alguien a quien pudiera ofender fácilmente, pero preguntó de todos modos.

Gu Lichen lo miró con frialdad.

—No necesito decírtelo. Lo que sea que pase entre Keke y yo no es de tu incumbencia.

Sin embargo, Gu Lichen parecía tranquilo cuando dijo eso. Sus profundos ojos de fénix eran infinitamente oscuros. Nadie podía entender lo que estaba en su mente.

—Yan Luochu, sé qué tipo de persona es mi novio. No tienes que preocuparte. Mi novio y yo nos llevamos muy bien. Sé mejor que nadie lo serio que es para mí, así que vete, ¿de acuerdo? —La voz de Zhong Keke rompió el silencio en la sala.

Yan Luochu abrió la boca como si quisiera decir algo, pero al final no dijo nada. Salió abatido de la sala y se apoyó contra la pared del pasillo.

“¿Qué estoy haciendo?”, pensó Louchu. Quería desesperadamente compensar a Keke acercándome a ella y protegiéndola, pero no hice nada cuando ella necesitaba protección.

—Y ahora estoy saltando desesperadamente como un payaso, diciendo que Gu Lichen tiene otro motivo para juntarse con Keke.