Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 2713

Madame Ye tardó un poco en decir:

—¿Estás diciendo la verdad esta vez? No faltarás a tu palabra como lo hiciste entonces, ¿verdad?

Zhuo Qianyun sabía que Madame Ye se refería al hecho de que en ese entonces había prometido separarse de Ye Wenming en el hospital. Sin embargo, finalmente llegó a la Ciudad L para buscar a Wenming de nuevo. Lo hizo por Xia Xi y esperaba que Wenming pudiera retirar la demanda.

—No —dijo ella.

Madame Ye miró a Zhuo Qianyun.

—Confiaré en ti por última vez. Espero que no me decepciones.

Zhuo Qianyun no dijo nada más, pero miró hacia las escaleras, esperando que apareciera Ye Wenming. Cada mirada adicional que recibía de él era una bendición para ella.

Quería ver más de él y grabar su rostro en su mente.

Por fin, su figura apareció a la vista.

Un traje negro envolvía su figura, mucho más esbelta que antes. Bajó los escalones con la espalda recta y pasos elegantes.

Su cabello cuidadosamente peinado se veía meticuloso cuando se combinaba con su hermoso pero solemne rostro.

Cuando Ye Wenming caminó hacia la sala de estar, Ruan Manlo se adelantó, lo abrazó y le dijo a la señora Ye:

—Vieja señora, no se preocupe. Cuidaré bien del Señor Ye en el banquete de esta noche.

—Está bien, preste atención a cuándo Wenming necesita tomar sus medicamentos. No deje que se agote. Llámeme si sucede algo —dijo Madame Ye.

Ye Wenming se despidió de su madre y salió de la mansión con Ruan Manlo.

Zhuo Qianyun vio con impotencia a los dos pasar junto a ella. Sus ojos estaban llenos de desgana porque quería estirar la mano para agarrarlo. Quería decirle que la acompañara un ratito más porque nunca más iba a tener ese tipo de compañía.

Aunque se veía delgado en el video, parecía estar de buen humor y se reía con la gente. Ruan Manlo estaba a su lado, su rostro se veía un poco tímido y encantador.

Los comentarios debajo del video especularon sobre la relación entre Ruan Manlo y Ye Wenming.

Al ver el video, los ojos de Zhuo Qianyun se sintieron adoloridos como si las lágrimas fueran a derramarse en cualquier momento.

No podía ser ella quien lo acompañara al final.

Podría estar con Ruan Manlo o con alguna otra mujer, pero... no habría lugar para ella.

Terminar el matrimonio y regresar a la ciudad de Shen podría ser lo mejor para ella.

Apagó su teléfono, se sentó en la sala de estar y esperó en silencio. Los minutos pasaban y no sabía cuánto tiempo había esperado hasta que escuchó algo. Se levantó y miró hacia la entrada del edificio principal.