Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 2796

—Sólo lo he dicho en la rueda de prensa para disipar los rumores lo antes posible. El precio de las acciones de Grupo Ye había caído debido a esos rumores, causando muchas pérdidas. Es más eficaz que yo diga esas cosas en lugar de Ye Wenming o que Grupo Ye haga una declaración —dijo Zhuo Qianyun.

Ling Yiran dijo con preocupación:

—Así que tú y Ye Wenming...

—Tenemos la intención de ser una pareja de enamorados por un tiempo. Encontraremos otra excusa para anunciar nuestro divorcio una vez que esto termine —dijo Zhuo Qianyun antes de sonreír—. De acuerdo, no te preocupes por mí. Fingir ser una pareja de enamorados con Ye Wenming o divorciarme de Ye Wenming es mi elección. Nadie me obligó. Yo quise.

—¿Estás segura? —Preguntó Ling Yiran.

La gasa de Zhuo Qianyun se suavizó.

—Le quiero. No quiero que Grupo Ye, que él ha trabajado tan duro para construir, sufra más pérdidas, así que estoy dispuesta a fingir una relación amorosa con él. Sin embargo, también estoy dispuesta a divorciarme de él y dejarlo libre porque no me ama.

Su tono era tranquilo cuando hablaba. Su amor y su odio habían vuelto a ser paz.

Quizás era el mejor resultado para ella y Ye Wenming.

—Por cierto, ¿has visto las noticias sobre Gu Lichen y Keke? —Zhuo Qianyun preguntó mientras cambiaba de tema.

Ling Yiran sabía a qué noticia se refería Zhuo Qianyun.

—Sí.

—A juzgar por la foto, Gu Lichen debe ir en serio con Keke. Antes tenía dudas, pero creo que ahora mis dudas son innecesarias —dijo Zhuo Qianyun con una sonrisa.

—Yo también. Temía que Lichen encontrara a cualquier mujer al azar por lo que le había dicho, pero ahora no lo parece. Y aunque sólo he visto a Keke unas pocas veces y no he pasado mucho tiempo con ella, puedo decir que es sincera. Quizá sólo una mujer tan sincera pueda conmover a una persona como Lichen —dijo Ling Yiran.

Sabía que probablemente él tampoco sobreviviría si algo le ocurría a ella.

Egoístamente quería al bebé y lo arrastró hacia él.

—Tienes razón. Mi principal preocupación debería ser cuidar bien de mí misma —murmuró. Ella había pensado que no importaba si existía.

Sin embargo, ¡él le había hecho saber lo importante que era para él!

Ling Yiran movió el cuerpo para intentar tumbarse. Acababa de mover el cuerpo cuando de repente jadeó y frunció el ceño.

—¿Qué está pasando? —Inmediatamente le preguntó nerviosa.