Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 2867

Una leve sonrisa apareció en sus labios.

—Honestamente, no te hago responsable ya que nunca me engañaste —Desde el principio, ella supo de su afecto por otro.

Desde el comienzo de su relación, él fue sincero acerca de no devolverle el amor.

Dada esa realidad, ¿cómo podía razonablemente esperar que él la priorizara en tiempos de adversidad, junto con Ling Yiran?

Gu Lichen comprimió sus labios en una línea apretada, su inquietud aumentó. En silencio, Zhong Keke observó a la persona que tenía delante. Sus dedos se levantaron con cuidado, rozando su frente, el puente de su nariz, y finalmente posándose en sus labios.

El consenso era que los hombres con labios finos carecían de sentimiento.

Sin embargo, Gu Lichen no fue despiadado. Él solo confirió sus sentimientos a otra persona.

Una risa silenciosa escapó de los labios de Zhong Keke cuando se dirigió a Gu Lichen:

—Una vez dije que no me entregaría a nada demasiado íntimo, como besarte, hasta que te enamoraras de mí. Sin embargo, deseo revocar esa declaración. ¿Puedo?

El comportamiento de Gu Lichen se congeló. Su declaración superó sus expectativas.

Con un movimiento delicado, puso sus manos alrededor de su cuello, acercándolo un poco más. Poniéndose de puntillas, presionó sus labios contra los de él...

—Gu Lichen, lo siento. Me disculpo porque estoy rompiendo mi promesa. Pido disculpas porque el esfuerzo por encender tu amor dentro de mí ahora parece inútil.

Zhong Keke selló el beso, cerró los ojos y derramó su afecto en el acto.

Nunca imaginó estar con un hombre como él, amándolo incondicionalmente. Sin embargo, sus sentimientos habían crecido sin que ella se diera cuenta, convirtiéndose en una emoción abrumadora que ahora la dejaba asustada.

—¿Estás sugiriendo que deberíamos separarnos? —Casi apretó las palabras entre los dientes.

—Sí —afirmó.

—¿Por qué? —Su mirada era intensa—. ¿No me amas? ¿No quieres mi afecto también? ¡Si el incidente de hoy te ha molestado, me disculparé y haré las paces como quieras!

Tonos ansiosos marcaron su discurso, un pánico indescriptible se apoderó de él.

Zhong Keke respondió:

—No exijo tu expiación. Es solo que ya no puedo albergar amor por ti. Será mejor que nos separemos.

—¿Qué quieres decir con que será mejor para nosotros? —Disputó la idea—. Además, ¿dices que ya no puedes amarme? ¿Eso significa que tu amor por mí ha disminuido?