Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 289

Él hizo una pequeña pausa mientras acariciaba los dedos de ella. "¿Por qué quieres volver tan pronto?".

"Me he recuperado de mi lesión. Ya no tengo ninguna razón para vivir aquí". Ella se mordió un poco el labio.

"¿Quieres salir de aquí?". El rostro de él se enfrió.

"Sí". Ella asintió.

"¿Estás tan desesperada por alejarte de mí?". Incluso su voz se había vuelto fría.

"Estoy acostumbrada a estar sola", dijo ella.

Él hizo una mueca repentina. "¿Acostumbrada a estar sola? Si ese es el caso, ¿por qué me llevaste a casa en primer lugar? Fuiste tú quien dijo que estás demasiado sola, así que querías que alguien te acompañara. También fuiste tú quien dijo que querías estar conmigo y que querías que confiemos el uno en el otro. ¿Has olvidado todo eso?".

Las pestañas de ella temblaron un poco. ¿Cómo podía haberlo olvidado? Sin embargo, ahora todo era una broma.

Ella guardó silencio, y él la miró fijamente. La presión sofocante estaba nuevamente en el aire.

De repente, la voz de él sonó en sus oídos una vez más. "Dijiste que te querías ir porque tu herida se había curado más o menos, ¿verdad? ¿Eso significa que si estuvieras lastimada, estarías dispuesta a quedarte aquí?".

Al estar sorprendida, ella levantó la cabeza de repente y lo miró fijamente.

Sin embargo, él se inclinó hacia adelante en un instante. Con su mano en la parte de atrás de la cabeza de ella, sus delgados labios se pegaron instantáneamente a los labios rojos de ella.

Ella sintió su aliento llenando la punta de su nariz, y antes de darse cuenta, el beso había comenzado.

Él estaba sonriendo, pero eso la hizo temblar. Ella se quedó fría, y sus palmas y espalda estaban cubiertas de sudor.

¡Ese era Yi Jinli, un hombre que gobernaba Ciudad Shen!

Ella era como un peón en su mano. ¡No podía escapar sin importar qué!

¿Podría todavía escapar de él? ¿O nunca podría escapar a menos que él se cansara de ella?

En ese momento, Ling Yiran de repente se preguntó sobre su futuro.

Yi Jinli se puso de pie después de terminar su declaración. Él le dirigió una mirada autoritaria y se alejó.