Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 410

"¿Por qué no encendiste las luces?", preguntó ella con curiosidad.

"Te extraño", dijo él, dando una respuesta irrelevante.

Su rostro de repente se puso rojo, y su corazón parecía latir rápido. En ese momento, Ling Yiran se alegró de que todavía estuviera oscuro, ya que significaba que él no podía verla sonrojarse.

"¿Qué hay de ti? ¿Me extrañaste hoy?". Su voz siguió sonando en sus oídos mientras su aliento rociaba su cuello con una sensación de hormigueo.

Sintió como si toda su atención estuviera en su cuello, y después de sentir su aliento, tuvo la sensación de que sus labios estaban tan cerca de sus orejas que si él se acercaba un poco más, sus labios besarían sus orejas.

Justo cuando ella estaba un poco perdida en sus pensamientos, un leve dolor repentinamente se apoderó de sus orejas. Sintió una conmoción antes de volver en sí. Entonces... su rostro se puso aún más rojo.

Él… le estaba mordiendo la oreja, metiendo el lóbulo de la oreja en su boca y haciendo que todo su cuerpo temblara levemente.

"¿Me extrañaste?". Su voz baja sonó una vez más.

"Sí te extrañé...", respondió ella, casi temblando. "Bueno... déjame ir primero. Quiero dejar mi bolso”.

Dijo ella, respirando con dificultad. Solo sintió que la atmósfera era tan ambigua que apenas podía respirar.

Sin embargo, en lugar de dejarla ir, fue más allá y preguntó: "¿Me amas?".

Ella estaba atónita. El amor... era demasiado profundo. ¿Lo ‘amaba’?

"Me... gustas", dijo Ling Yiran con sinceridad, respirando profundamente. Sí, solo le gustaba. Sus sentimientos por él ahora no eran todavía ‘amor’.

Inconscientemente, quería negarlo, pensando que sus palabras podrían ser simplemente palabras dulces.

Sin embargo, otra voz en su corazón discutió con ella.

La gente como él no se molestaba en decir palabras dulces, y tampoco tenía que hacerlo.

Era como si él le estuviera mostrando todos sus sentimientos sin el menor ocultamiento.

Ella solía pensar que incluso si él le decía que la ‘amaba’, ese amor era solo afecto. Ella no esperaba que su ‘amor’ fuera profundo o fuerte, pero ahora...

"No te estoy pidiendo que te enamores de mí de una vez, y no te estoy pidiendo que me abras tu corazón de inmediato. Solo quiero que tu afecto por mí sea tanto como la décima parte de mi amor por ti. Solo quiero gustarte un poco más", murmuró.