Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 446

Ella estaba asombrada. Entonces, un rubor se apoderó de su rostro. "Yo... yo...".

Ling Yiran se sintió repentinamente perdida. ¡Era como si responder sí o no fueran ambos incorrectos!

"¡No puedes decir que no!". Yi Jinli puso de forma dominante su mano alrededor de la cintura de Ling Yiran y le dijo: "Si llego a tener hijos, solo será con Hermana, así que... si quieres ser madre, solo puedes ser la madre de mis hijos".

La cara de Ling Yiran se puso más roja. "Este es el hospital". Todavía había gente moviéndose de un lado a otro donde estaban, y ya había gente mirándolos cuando él la abrazó.

"¿Y qué?". Sus labios se presionaron cerca de sus oídos. Él estaba respirando sobre sus orejas y cuello. "¿Entiendes lo que acabo de decir, Hermana?".

Su cuerpo no pudo evitar temblar. Su voz y su respiración parecían un hechizo, que la hechizó a asentir.

Después de subir al coche, la cara de Ling Yiran todavía estaba roja.

Yi Jinli conducía, y ella no pudo evitar mirarlo desde el asiento del pasajero.

Desde su punto de vista, podía ver su perfil—contornos nítidos, ojos profundos y una nariz alta y recta que hacía que su rostro pareciera mucho más definido que el de un asiático común. Sus rasgos, las líneas de su mandíbula y las líneas de su cuello todo parecían exquisitos.

Si tuvieran hijos, ¿cómo se verían? El pensamiento instantáneamente llenó su mente.

"¿Te gusta tanto mirarme?". La voz de Yi Jinli de repente sonó en el oído de Ling Yiran, interrumpiendo su trance.

"¿Cuándo estarás libre? Haré una cita con Bai Tingxin, pero será mejor que nos demos prisa. Ese tipo You solo estará detenido por siete días", dijo Qin Lianyi.

"Mañana, entonces", dijo Ling Yiran.

"¿Mañana? ¿No tienes trabajo mañana?", preguntó Qin Lianyi. Aunque mañana era fin de semana, parecía que Yiran solo tenía libres los sábados por la tarde.

"El pequeño restaurante donde trabajo está cerrado estos días, así que mañana estoy libre. ¿Y tú? ¿Estás libre mañana?", preguntó Ling Yiran.

"Por supuesto que lo estoy", dijo Qin Lianyi. "Mañana, entonces. Te recogeré mañana. Iré a informar a Bai Tingxin. Hablaré contigo más tarde una vez que hayamos fijado la hora”.