Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 497

En cuanto a ella, no tenía forma de refutarlo.

...

Finalmente, Qin Lianyi llevó a Bai Tingxin a su casa.

En la casa de Qin, el Sr. y la Sra. Qin le dieron una cálida bienvenida a Bai Tingxin y le pidieron que se uniera a ellos para cenar.

Bai Tingxin aceptó de inmediato. Qin Lianyi, por otro lado, estaba secretamente asustada al escuchar eso. Le preocupaba que cuanto más tiempo se quedara Bai Tingxin, mayor sería la posibilidad de que tuviera un desliz mientras hablaba con sus padres.

Después de la cena, Qin Lianyi rápidamente llevó a Bai Tingxin a su habitación y le preguntó: "¿Cuándo te vas?".

"¿Esperas que me vaya lo antes posible?", preguntó con las cejas arqueadas.

Ella rio secamente. “Me temo que el entusiasmo excesivo de mis padres te irritará. Creen que eres mi novio de verdad, así que aprovecharán todas las oportunidades para buscar más información sobre ti".

"No es para nada molesto. A veces, encuentro interesante charlar con ellos”, dijo Bai Tingxin. Cuando conversaba con sus padres, también podía descubrir muchas cosas sobre Qin Lianyi.

Se había enterado de su infancia y otras experiencias memorables. Podía escuchar más sobre ella a través de las conversaciones con sus padres.

“Una cosa más... Independientemente de lo que suceda en el futuro, siempre debes recordar llamarme. Ya no te permito buscar a Ling Yiran", dijo Bai Tingxin.

“Yiran es mi amiga. Es normal que la busque cuando me meto en problemas". Ella argumentó.

Él se rio entre dientes, pero era más como un tono burlón. “Si buscas a Ling Yiran de nuevo, créeme cuando te digo que Yi Jinli conseguirá que alguien se deshaga de ti".

Ahora que lo pensaba, ¿no estaba él también celoso de su relación con Ling Yiran? Aunque sabía que solo eran amigas, todavía se sentía incómodo por eso.

Al igual que hace años, cuando regresó de inmediato debido al caso de Ling Yiran, dejándole solo una breve nota de despedida.

Qin Lianyi solo pudo asentir obedientemente. En esta generación, incluso a las mujeres les resultaba difícil mantener una amistad.

Bai Tingxin luego dijo: "Haré que mis abogados se reúnan contigo más tarde para darle seguimiento a tu caso".

"¡Muchas gracias!". Ella inmediatamente le dio las gracias. Después de todo, con la ayuda de un abogado, no tendría que pasar por muchos problemas.

"Además... ¿No saben tus colegas que tienes novio?".