Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 598

Ella casi se asfixia con su abrazo.

"Yo no... No...", ella dijo con dificultad.

Justo cuando Ling Yiran pensó que podría desmayarse por falta de aliento, una repentina ráfaga de fuerza la sacó de los brazos de Gu Lichen. Al momento siguiente, ella escuchó el sonido de un puñetazo en su oído. Fue seguido por un bufido ahogado, el sonido de objetos pesados ​​cayendo y el estrépito de sillas y estantes.

Ling Yiran respiró hondo. Entonces, todo lo que podía ver era la cara de Yi Jinli.

¡Fue Jin quien la había arrancado de los brazos de Gu Lichen! Ling Yiran miró fijamente a Yi Jinli que estaba de pie junto a ella, preguntándose por qué él estaba aquí.

Con una cara sombría, Yi Jinli miró a Gu Lichen, quien acababa de ser golpeado contra el suelo por él.

Gu Lichen ahora estaba apoyado con inquietud contra una fila de estantes, rodeado por el desastre de su accidente.

La sangre le corría por la comisura de los labios. Era obvio que el puñetazo de Yi Jinli no había sido ligero.

"¿Sabes lo que estás haciendo?", preguntó Yi Jinli con un rostro pálido y espantoso. Su voz era tan fría como el viento helado, y el mero sonido de ella haría temblar a la persona promedio.

Sin embargo, Gu Lichen se encontró con los ojos de Yi Jinli con una sonrisa en su rostro. "Lo sé".

"¿Lo sabes? ¿Todavía lo hiciste cuando lo sabías? ¿Quieres poner a la familia Gu en contra de la familia Yi, Lichen?". Yi Jinli dijo condescendientemente.

Gu Lichen se limpió la sangre de los labios y se puso de pie lentamente. "Jinli, sabes que he estado buscando a alguien, ¿no? Ling Yiran bien podría ser quien estoy buscando".

Él sabía que Gu Lichen tenía razón. ¡Realmente tenía miedo!

Él temía que Yiran descubriera que ella era la que Gu Lichen había estado buscando... Temía que ella descubriera la verdad que él le había estado ocultando.

Ling Yiran sentía que le dolía la mano mientras Yi Jinli la sostenía con mucha fuerza.

Él le agarraba la mano con tanta fuerza que... empezó a temblar. Era como si le estuviera contando silenciosamente su pánico a ella.

Ella nunca pensó que su mano temblaría así.

Tomando una respiración profunda, Ling Yiran levantó la otra mano y agarró la mano temblorosa de Yi Jinli.