Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 746

Yi Jinli envolvió sus brazos alrededor de la cintura de Ling Yiran y colocó sus labios ligeramente en el lóbulo de su oreja. "Parece que Qin Lianyi dice algunas cosas bonitas a veces".

"¿Qué?". Ling Yiran intervino.

"Elegiste un buen marido". Mientras Yi Jinli hablaba, lamió suavemente el lóbulo de la oreja de Ling Yiran con la punta de su lengua.

Ella jadeó, sonrojándose aún más. "Jin...". Ella estaba empezando a tartamudear un poco.

"Después de un año, nos casaremos de inmediato", murmuró Yi Jinli. 'Un año. La esperaré por un año. En un año, quiero que ella realmente me pertenezca'.

Él separó sus labios delgados y le mordió el lóbulo de la oreja suavemente antes de chuparlo, lo que la hizo temblar.

"Jin, no...". Ella ahora era como un camarón hervido. Sus oídos estaban tan calientes que toda su sangre parecía estar corriendo allí.

Sin embargo, era como si no la hubiera escuchado. Continuó chupando tiernamente el lóbulo de su oreja antes de besarla en la barbilla, el cuello y todo el camino hasta el pecho.

Ella se sonrojó y apenas pudo mirarlo a la cara. "No... No lo hagas. ¿Y si entran los sirvientes?".

Después de todo, esta era la cocina. Si alguien los viera...

"Nadie se atreve a entrar sin mis órdenes", murmuró, y su beso cayó sobre su corazón.

¡De repente, ella sentía que su corazón latía más fuerte!

Un latido tras otro, ella podía oírlo todo.

"Yiran". Él tomó su rostro entre sus manos, obligándola a mirarlo. "¿Sabes qué? Nadie en este mundo te amará más que yo, así que quédate obedientemente conmigo, ¿de acuerdo?".

También tenía miedo porque la amaba demasiado.

Tenía miedo de que lo dejara algún día. Quizás solo cuando ella lo amara más y se mostrara más reacia a dejarlo, calmaría su malestar.

...

Por otro lado, Qin Lianyi sostenía su teléfono y buscaba noticias de chismes sobre la lista negra de Hao Yimeng. Ella estaba comentando y compartiendo los artículos.

No escatimaba esfuerzos para pisotear a Hao Yimeng. ¡Hao Yimeng fue tan mala con Yiran!

Por lo tanto, Qin Lianyi también enviaba noticias relevantes y chismes a algunos familiares y amigos que conocía, pidiéndoles que los compartieran. También le envió un enlace a Bai Tingxin en WeChat y escribió: "Ayúdame a compartir esto, y será mejor que escribas una leyenda. P.D.: asegúrate de que tenga más de 15 palabras".

En una enorme sala de reuniones, los altos ejecutivos de la compañía veían a su presidente mirando su teléfono con una expresión extraña en el rostro.