Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 819

"Me incriminaron por robar dinero en clase y todos pensaron que de verdad lo había hecho. La maestra no dejaba de sermonearme, queriendo que lo admitiera. ¡Mis padres incluso tomaron la iniciativa de decir que estaban dispuestos a pagar por el dinero que robé cuando realmente no lo hice!".

Qin Lianyi dijo mientras sollozaba, su nariz de repente se sentía algo adolorida. "No sé si puedes entender esa impotencia. Es como si el mundo entero te hubiera traicionado, así que estás indefenso y solo. Por mucho que traté de explicar y defender mi inocencia, todo fue en vano. En ese momento... Yiran creyó en mí e incluso me ayudó a descubrir quién se robó el dinero".

Con eso, Qin Lianyi se rio de nuevo. "¡Decidí entonces hacer de Yiran mi mejor amiga para siempre!".

Bai Tingxin frunció sus delgados labios. '¿Fue solo... algo tan pequeño que hizo que Lianyi estuviera dispuesta a arriesgar todo por Ling Yiran?'.

No era como si él no pudiera entender el sentimiento del que ella hablaba.

Ya que él era un hijo ilegítimo, se había enfrentado a tantas acciones engañosas desde que era pequeño.

A pesar de que fue engañado y agraviado muchas veces, él lo soportaría. Él comprendía que en lugar de limpiar su nombre, era mejor guardar sus fuerzas y atacar con un solo golpe cuando fuera lo suficientemente fuerte.

Así como eligió el mejor momento para convertirse en el patriarca de la familia Bai de una sola vez, mientras que su tía y sus dos hijos sólo podían vivir bajo sus narices.

"Por lo tanto, ¿elegiste creerle a Ling Yiran cuando fue encarcelada?", preguntó Bai Tingxin.

"Sí, creo en Yiran. ¡Si ella dijo que no fue ella, definitivamente no fue ella! ¿No es así como se supone que son los verdaderos amigos?", dijo Qin Lianyi.

Bai Tingxin guardó silencio. ‘Esta mujer tonta. ¿Sabe cuántas personas en este mundo han sido traicionadas por su mejor amigo?’.

‘El impulso de esta chica incluso me hizo sudar frío’.

Qin Lianyi se sorprendió. Miró a la persona frente a ella con esos ojos redondos, recordando que Bai Tingxin la protegió enfrentando a Yi Jinli después de que ella abofeteó al hombre. Él incluso estaba dispuesto a asumir las consecuencias de su impulso.

Lo de hace rato fue un gran desastre y ella estaba demasiado enojada como para pensar en ello.

Sin embargo, ahora que lo pensaba en detalle, ella sintió un rastro de emoción indescriptible. '¿Él no quiere vengarse de mí? ¿Por qué siempre parece que me protege?’.

"Incluso si... voy en contra de Yi Jinli, ¿estás dispuesto a ser el que me defienda?". De alguna manera, las palabras escaparon de su boca.