Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 84

Esa noche, Yi Jinli fue despertado por el grito amortiguado de Ling Yiran. Cuando encendió las luces, se dio cuenta de que ella dormía inquieta y estaba murmurando algo en voz baja.

Pero su voz era demasiado suave para que él escuchara lo que estaba diciendo con claridad.

"¡Hermana!" la llamó. Luego levantó una mano y la apretó contra sus sienes. Descubrió que su frente estaba llena de sudor frío y su temperatura era alta.

Yi Jinli escurrió apresuradamente una toalla empapada en agua tibia y secó la frente de Ling Yiran.

Pero sus ojos todavía estaban cerrados y seguía murmurando algo.

No importa cómo la llamara, sus ojos nunca se abrieron.

Frunció sus labios delgados y la inquietud se extendió por su cuerpo. Estaba momentáneamente sin poder descifrar cómo hacer que se sintiera más cómoda.

"Esta es probablemente la primera vez que me he preocupado por una mujer de esta manera".

Sacó su móvil e inmediatamente marcó el número de su secretario, Gao Congming. Por lo tanto, a las dos de la mañana, el secretario Gao recibió una llamada de su jefe.

"Rápido, consígueme un médico y tráelo al apartamento de alquiler. Yiran tiene fiebre". Había un leve indicio de ansiedad en la voz de Yi Jinli.

"¿Ahora?" Gao Congming se sorprendió.

"Sí, ahora," Yi Jinli ordenó.

Gao Congming no dijo nada y se puso rápidamente en contacto con un médico. Luego se levantó de su cálida cama en medio de la noche y llevó a un médico al apartamento de alquiler.

Después de haber realizado un examen básico de Ling Yiran y descubrir que se había caído por una escalera mecánica, concluyó: "No hay ningún problema grave. Es posible que, debido a la lesión de hoy, la inflamación haya causado fiebre. Le recetaré algunos antipiréticos para ella ahora. Que se los tome primero y si la fiebre aún persiste mañana, llévela a un hospital para un examen más detallado".

"Muy bien, entiendo", dijo Yi Jinli.

Una vez que el médico terminó de recetar los antipiréticos, Gao Congming se despidió de él. Yi Jinli permaneció en la casa y sirvió un vaso de agua tibia para que Ling Yiran bebiera con la medicina.

Cuando Gao Congming se acercó a la entrada, pudo ver a su jefe llevando la medicina y el vaso de agua al lado de la cama.

Gao Congming no pudo evitar quedarse atónito. "¿Cuándo he visto al Joven Amo Yi cuidar a alguien así? ¡Y ese alguien es una mujer!”

"¿El Joven Amo Yi de verdad no ama a Ling Yiran? O en realidad... ¡¿no sabe que está enamorado de ella?!"