Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 982

¡Eso era porque él tenía otras cosas que le importaban!

¡Sin embargo, Gu Lichen estaba dispuesto a hacerlo!

Él estaba dispuesto a hacer algo tan extremo por Ling Yiran. ¡Era como si todo lo que le importara fuera Ling Yiran!

Guo Xinli se había ido, pero Ling Yiran estaba parada estupefacta donde estaba. Lo que acababa de decir Guo Xinli resonaba en su mente.

'¿Gu Lichen casi mató a Su Xi por mí?’.

'¿Cómo es eso posible? Él siempre se preocupó por mí porque pensaba que yo era quien él estaba buscando’.

‘Ahora que él tiene a la Hermana Lifang a su lado, ¿por qué lo haría…?".

La escena de ayer en la comisaría volvió a pasar por su mente. Él dijo que la amaba con una expresión seria.

Así como cuando él dijo que la encontraría y sería bueno con ella con la misma expresión seria cuando él era un niño.

Su mirada seria parecía nunca haber cambiado después de tantos años...

...

Mientras Ling Yiran salía del edificio después del trabajo, Gu Lichen la detuvo.

"¿Por qué no cenamos juntos? Después de todo, ayer pasamos por muchas cosas", él dijo.

Ling Yiran miró de manera algo inexpresiva a la persona frente a ella. Luego, ella recordó lo que le dijo Guo Xinli. ‘¿Este hombre estuvo a punto de matar a alguien por mí ayer?’.

Ella iba a esta cafetería cuando le daba pereza cocinar. La comida aquí sabía bien y el precio también era asequible.

"No te importa comer aquí, ¿verdad?", ella preguntó. Era un lugar que ella podía pagar con sus ingresos actuales.

Por supuesto, si fuera por Gu Lichen, ella sabía que él elegiría un restaurante elegante.

Sin embargo, ella no quería deberle más nada, incluyendo el dinero para una comida.

"¿Por qué me importaría? Estoy bien con cualquier lugar que elijas". Gu Lichen gentilmente sacó su silla y se sentó.

Incluso si solo se trataba de una simple mesa cuadrada y sillas de comedor que se podían encontrar en cualquier lugar, Gu Lichen se sentó con una elegancia indescriptible.

Era como si la cafetería se hubiera convertido en un elegante restaurante.