Le pareció inexplicable a Telmo que Joaquín no le dejaba ir a la residencia de Denis. No solo eso, sino cuando su médico había regresado muy preocupado tras la última visita, que había hecho goteo intravenoso a Joaquín.
Telmo sintió que Denis debía saber algo.
Sin embargo, cuando Telmo llamó a Denis, ella le bombardeó a la cara y a cubiertas con palabras como “donjuán”, “amante de la diversión”, “maestro de las maldades”.
Telmo miró su móvil colgado unilateralmente, le resultó aún más inexplicable.
Decía que era un donjuán. Pero no fue el primer día que Denis sabía que él era un donjuán y un amante de la diversión.
Además, ¿qué le importaba a ella?
Y, decía que era un “maestro de maldades”. ¿A quién podría enseñar maldades?
Telmo se quedó pensando mucho tiempo, pero nunca llegó a una conclusión.
Denis colgó la llamada de Telmo y seguía molesta.
Este idiota era inocente diciendo lo a las buenas era simple y a las malas era estúpido. Se le habían refrescado totalmente tanto los recuerdos.
¿Cómo podría un idiota entender esas cosas?
¿Qué ardor y qué cosas? ¿Alguna vez había visto a un niño de ocho años, que lo entendía?
¡Solo sería Telmo, quien le enseñó esas cosas!
De modo que, Telmo se llevó la bronca.
Justo al colgar el teléfono, Vivian llamó a la puerta.
-¿Aún no se ha detectado nada sobre la filtración?-
Debido a que no se podía publicar y se tenía que investigar a escondidas, precisamente por eso aumentaba la dificultad.
Vivian negó con la cabeza preocupada.
-No es necesario investigar más.-
-Presidenta Denis, ¿por qué no preguntas directamente al director financiero?-
-Me fío de él, si revelara el secreto, antes de nada, iría a la cárcel. Si fue un denunciante accidentalmente, es posible que no lo sepa ni él. ¿Por qué tendría que romper el a corazón a un viejo empleado en este momento?-
Denis frunció el ceño y pensó profundamente, -Bueno, primero le dices a los recursos humanos, que me envién todos los currículums del personal del departamento de finanzas a mi correo.-
-¿Quieres buscar uno por uno? Será un trabajo enorme.-
-Por eso primero investigo en el departamento de finanzas. Vivian, no queremos una “bomba” de tiempo en el Grupo Alonso.-
-Si en el departamento de finanzas no lo encuentras, ¿pretendes buscarlo por toda la empresa? ¿Sabes cuántos empleados hay en todo el Grupo Alonso?-
Era demasiado trabajo. No esperaba que Denis usara el método más estúpido.
-Nada, lo haré yo.- Vivian sabía que esta mujer parecía callada, pero realmente era muy terca.
Era medianoche, Denis estaba en la oficina, leyendo lo que había enviado Vivian.
Un currículum llamó su atención.
En el currículum, había una fotografía de una chica hermosa y parecía tener mucha vitalidad.
Denis cogió el teléfono y marcó una serie de números, -Aitor, ven a la empresa.-
Obviamente, la otra persona no esperaba, que ella hiciera esta tal petición en ese momento, -¿Ahora?-
Por la voz sorprendente de Aitor Camacho, ella detectó que no estaba muy dispuesto.
La mujer que estaba delante del escritorio, le respondió tranquilamente sin duda, -Ahora.-
-Pero…-
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