Amor, Guerra&Mi Marido Vegetativo romance Capítulo 484

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Alrededor de media hora después, Ángela regresó a casa.

Entró apresuradamente a la casa, ni siquiera tuvo tiempo de cambiarse los zapatos, fue directamente hacia Stuardo y preguntó: "¿Dónde está Ian? ¿Por qué estás aquí solo?"

Justo cuando Stuardo estaba a punto de responder, ella notó algo raro en su ropa.

"¿Qué pasó con tu ropa?"

Su camisa estaba hecha un desastre. Ángela siguió las arrugas hasta su espalda y descubrió que su camisa estaba rasgada por detrás.

A través del agujero, se podía ver la piel de Stuardo cubierta de sangre.

Aunque la sangre ya se había coagulado, uno podía imaginar cuánto dolor debió haber sentido en ese momento.

"¿Ian te mordió?" ella se acercó a él y lo miró a los ojos.

"Eso es lo que me merezco", respondió con indiferencia, "Él está en su cuarto."

"Está bien, voy a verlo primero. Quédate aquí y espérame". Dicho esto, se dirigió hacia el piso de arriba.

Mike se acercó a Stuardo y examinó detenidamente su herida, no pudo evitar exclamar: "¡Los dientes de Ian son muy afilados! ¡Tu herida parece la de una mordida de perro!"

Stuardo se dio la vuelta y miró a Mike con seriedad: "Mike, ¿Ian es mi hijo?"

Mike se sobresaltó ante su pregunta y tardó unos segundos en recuperarse: "¿Qué estás diciendo? ¿No fue tu primer hijo con Ángela el que te forzó a abortar? ¡Ian es adoptado! ¿Necesitas ver el certificado de adopción?"

Stuardo asintió: "Muéstrame el certificado de adopción".

Mike estaba desconcertado: "¿Qué?"

Stuardo: "¿Qué sucede?"

Mike se sintió incómodo: "¡El certificado de adopción no está conmigo! Deberías pedírselo a Ángela. Pero te sugiero que no lo hagas, porque cada vez que mencionas a Ian, le recordarás que casi lo lastimaste una vez."

Stuardo: "Hoy ya le pedí disculpas a Ian."

"¿Y qué logras con eso?" Mike decidió aprovechar la oportunidad para sondearlo, "Incluso si Ian fuera tu hijo biológico, después de lo que le hiciste, nunca te aceptará."

Stuardo sintió como si su corazón fuera atravesado por un cuchillo afilado.

Mike tenía razón.