Amor profundo escondido de él romance Capítulo 83

Si había algo en lo que Everleigh era muy buena, definitivamente era en cómo podía reprimir sus emociones ocupándose de su trabajo y sus estudios. Lo llevaba dominando siete años.

El día que Grupo Godfrey anunció la boda de Theodore y Josephine, ella había completado personalmente tres operaciones. Recién se fue a su casa cuando el reloj dio las once de la noche. Cuando llegó, estaba tan cansada que no le quedaban fuerzas para ducharse. Se acostó en el sofá, sin querer siquiera moverse.

Recibió un mensaje de voz de Christopher.

Everleigh encendió el altavoz y reprodujo el mensaje. La voz casual de Christopher resonó en la habitación. "¡Bebé! ¡Hice la intervención y volveré en dos días! ¡Espérame!"

La palabra "bebé" hizo que se le erizara el pelo de la nuca. Rápidamente respondió: "No, será mejor que no vuelvas."

"¿Cómo puede ser eso? ¡Quiero volver y ver a mi preciosa hija! ¡Estás acabado si no la estás cuidando bien!"

Christopher, como la mayoría de los hombres, tenía un amor único por su hija. Sin embargo, debido a su personalidad de playboy, no podía vivir una vida tranquila por lo que dedicó todo su amor a su hija, Adrienne.

Adrienne parecía haber heredado su comportamiento rebelde de Christopher.

Everleigh se negó a hablar más con Christopher, así que dejó su teléfono en el sofá, se duchó y se fue a la cama.

Tenía demasiadas cosas en la cabeza. Primero, tenía que preocuparse por la tesis del Dr. Harrison. En segundo lugar, tenía que atender muchas operaciones durante los próximos dos días y, por último, pronto se presentaría para trabajar en la Universidad Médica de Ocpeace. No había ninguna parte de su cerebro que pudiera pensar en otra cosa.

Everleigh se quedó en el hospital durante la semana siguiente.

No tenía necesidad de preocuparse por sus hijos ya que se estaban quedando con su padre. Trabajaba horas extras casi todos los días y también realizaba la mayoría de las operaciones de entre sus compañeros. El Dr. Harrison estaba un poco preocupado cuando la vio.

"Olvídate de la operación esta noche, ¿quieres? ¿Por qué estás trabajando tan duro?"

"Está bien." Everleigh tomó un sorbo de té de su termo y dijo: "Ya me la habían asignado a mí. Me iré a casa cuando termine."

"Ya es suficiente." El Dr. Harrison le lanzó una mirada. "Vete a casa temprano por hoy está bien ¡Mírate! Si sigues así, parecerás una persona de 40 años cuando solo tienes 30."

El Dr. Harrison no esperó a que Everleigh respondiera. Se volvió hacia el médico que estaba a su lado: "Yo me encargaré de la operación de Everleigh esta noche. Si el paciente no está conforme, posponga la operación para la próxima semana."

La doctora sonrió: "¡Eres el mejor cirujano de este hospital! No creo que el paciente se oponga."

"Todavía no lo sabes." El Dr. Harrison miró fijamente a Everleigh, "Me temo que esta señora trabajadora de aquí va a operar a todos los pacientes de este hospital."

Everleigh se sintió impotente. Miró al Dr. Harrison y al médico a su lado antes de sonreírles a ambos.

Su mentor le había arrebatado la operación asignada. Estaba a punto de ir a buscar a sus hijos a la mansión de la familia Trevino cuando recibió una llamada.

Era de un número no guardado. Everleigh respondió a la llamada con desconfianza. "¿Hola?"

"¿Estoy hablando con la señora Trevino?"

La voz femenina que hablaba por teléfono le sonaba familiar. Finalmente la reconoció y dijo: "Ah, ¿es usted la señorita Allen?"

La Srta. Allen era la responsable de los procedimientos de admisión de estudiantes de la Escuela Primaria Sapphire. Everleigh había hablado con ella antes cuando había ido a la escuela a pagar las cuotas escolares.

Cuando se realizó el pago, se le informó a Everleigh que sus hijos podrían comenzar sus estudios en septiembre. El procedimiento de admisión era más sencillo ya que se trataba de un colegio privado.

"Sí, soy yo."

"Señorita Allen, ¿en qué puedo ayudarla?"

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