Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 1077

Jiang Sese volvió a su dormitorio después de salir del estudio.

Al igual que los últimos días, sacó su celular e hizo una videollamada.

La otra parte tardó poco en conectarse a la llamada. El atractivo rostro de Jin Fengchen apareció en su pantalla cuando la llamada se conectó con éxito.

“Fengchen”, lo saludó una sonriente Jiang Sese.

La comisura del labio de Jin Fengchen se curvó ligeramente. “¿Pasó algo? Pareces contenta”.

“No mucho. Es que el Primo fue a una cita a ciegas hace poco”.

Jiang Sese se acostó en la cama, apoyó la barbilla con una mano y sostuvo el celular con la otra.

“¿Una cita a ciegas?”.

Jiang Sese respondió: “Sí. Con la hija de una vieja amiga de la Tía”.

“¿Por qué aceptó?”.

Para Jin Fengchen, Fang Yuchen era alguien con su mentalidad. No le gustaba que lo controlaran, ya fuera en el trabajo o en una relación.

“Se vio arrastrado a la cita a ciegas sin saberlo”, explicó Jiang Sese.

Al mencionar eso, Jiang Sese se rio incontroladamente. “La Tía realmente se esfuerza por conseguir nietos”.

“Le pediré a Gu Nian que envíe a Xiaobao y a Tiantian a la Capital durante unos días”.

Cuando Jiang Sese escuchó su sugerencia, sus ojos brillaron de felicidad. “Eso sería maravilloso. Si Xiaobao y Tiantian están aquí, la Tía no tendrá la energía para emparejar al Primo nunca más”.

Jin Fengchen sonrió. “Si la Tía se entera de que piensas así, se quejaría contigo”.

Jiang Sese levantó las cejas. “Estoy del lado del Primo”.

Jin Fengchen le sonrió. Cambió de tema y preguntó: “¿Cómo está tu salud? ¿Sientes alguna molestia?”.

“Estoy bien”, Jiang Sese tenía una expresión de impotencia. “Ya llevas unos días preguntando esto. Estoy realmente bien”.

“Es bueno escuchar que estás bien”, dijo Jin Fengchen.

Jin Fengchen estaba preocupado porque no estaba a su lado. Le preocupaba que el patógeno de su cuerpo se reactivara de repente. Por eso preguntaba diariamente por su estado.

Jiang Sese miró fijamente a Jin Fengchen durante un largo rato antes de decir: “Fengchen”.

“¿Mmm?”.

“¿Te has vuelto a encontrar con Shangguan Yuan?”.

Jin Fengchen frunció el ceño. “No lo hice. ¿Por qué?”.

“¿No?”. Jiang Sese fue tomada por sorpresa.

¿Acaso Shangguan Yuan no había ido intencionadamente a Italia a buscar a Jin Fengchen?

Jin Fengchen la miró con una sonrisa divertida. “¿Por qué siento que estás decepcionada?”.

“No estoy decepcionada. Solo tengo curiosidad”.

Jiang Sese lo miró con descontento. “Si la ves, recuerda decírmelo, ¿de acuerdo?”.

Jin Fengchen levantó las cejas: “¿No confías en mí?”.

“No es eso. Solo quiero saber por qué te busca”, explicó Jiang Sese.

Jin Fengchen asintió. “De acuerdo, te informaré”.

“Jin Fengchen”. Jiang Sese entornó los ojos hacia él.

“¿Mmm?”.

Ella agitó el puño y advirtió: “Será mejor que no te dejes seducir por su belleza. Si no, te haré sufrir”.

Le advirtió a Jin Fengchen en broma, y eso lo hizo reír.

“¿De qué te ríes?”. Jiang Sese frunció el ceño con disgusto.

Jin Fengchen dejó de reírse y miró fijamente a Jiang Sese con una mirada intensa. Con su mirada profunda, dijo cada palabra con solemnidad: “Solo te tengo a ti en mi corazón. No me interesan en absoluto otras mujeres”.

“Eso ya lo sé”, dijo Jiang Sese y su corazón se hinchó.

Por supuesto, ella confiaba en él. Simplemente no confiaba en Shangguan Yuan.

Una persona egoísta como ella podría hacer cualquier cosa para conseguir su amor.

“Una vez que resuelva mi trabajo aquí, volveré a casa. Espérame como una buena chica, ¿está bien?”.

Jin Fengchen instó a Jiang Sese con una mirada suave.

Jiang Sese asintió. “De acuerdo, lo sé”.

Jiang Sese creía que volvería pronto a casa.

“¿Lo ha considerado?”, preguntó He Shuhan.

“Quiero discutirlo con Jin Fengchen en persona”.

He Shuhan miró a Jin Fengchen y aceptó: “De acuerdo, nos vemos esta noche”.

Después de colgar, He Shuhan informó a Jin Fengchen: “El Señor Fu quiere discutirlo con usted en persona”.

Jin Fengchen asintió.

...

Por la noche, Jin Fengchen llegó al condominio de Fu Jingyun.

Al igual que la última vez, fue allí disfrazado de repartidor de pizza.

Mientras el hombre de negro que vigilaba a Fu Jingyun no prestaba atención, Jin Fengchen aprovechó la oportunidad para noquearlo.

“Siento haberte molestado”, dijo Fu Jingyun y miró cómo Jin Fengchen tenía que llevar el uniforme para disfrazarse de trabajador de una pizzería. Le pareció divertidísimo ver el atuendo de Jin Fengchen.

¿Cuándo había necesitado el todopoderoso presidente del Grupo Jin llevar una vestimenta tan graciosa?

“¿Cómo estás?”, preguntó Jin Fengchen sin rodeos.

“Igual”, dijo Fu Jingyun, sirviéndole un vaso de agua.

Jin Fengchen tomó el agua y siguió preguntando: “¿Sabes que la investigación de Curry ya ha tenido éxito?”.

“¿Qué?”. Fu Jingyun se sorprendió.

“Parece que no estás al tanto”, dijo Jin Fengchen.

Fu Jingyun sonrió con amargura. “Efectivamente. No lo sé. Curry no me permite acercarme a su laboratorio en absoluto”.

Al principio, pensó que podría entrar en contacto con la investigación central si se unía al equipo de investigación de Curry. Sin embargo, Curry se puso muy en guardia y nunca confió en él.

Jin Fengchen colocó la taza en la mesa de café y miró a Fu Jingyun con una sonrisa poco aparente.

“Por eso esperaba que te hicieran partícipe de sus secretos esenciales...”.

Fu Jingyun frunció el ceño. “¿Estás seguro de que quieres atacar el laboratorio de investigación directamente?”.

“Sí. Es la única opción”.

No habría elegido un camino tan arriesgado si hubiera otra opción disponible.