Resumo do capítulo Capítulo 1286 Quiero verte ahora mismo de Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma
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“Tendremos que pensar en otra cosa”, dijo Fang Yuchen.
Jiang Sese sonrió con amargura: “¿Qué más podemos hacer? Si tuviéramos otra opción, no tendríamos que recurrir a tomarlo directamente”.
Fang Yuchen guardó silencio durante un rato y luego preguntó: “¿Se puso en contacto contigo Shangguan Qian?”.
“No”. Jiang Sese sacudió la cabeza.
“Entonces me pondré en contacto con él y le pediré su opinión”.
“Está bien, dime si hay alguna actualización”.
“De acuerdo”.
Jiang Sese salió del estudio y dejó escapar un pesado suspiro.
¿Podrían realmente detener la boda?
...
Poco después de que Jiang Sese se fuera, Fang Yuchen encontró el número de Shangguan Qian y lo marcó.
La llamada no tardó en ser contestada.
“Lo siento, realmente no puedo ayudarte”. Shangguan Qian ni siquiera esperó a que hablara e inmediatamente se aclaró.
“¿Por qué?”.
“Porque es mi hermana, su felicidad es más importante que cualquier otra cosa”.
Él dio un giro completo a su actitud.
Fang Yuchen no podía aceptarlo: “Ella también es la mujer que amas, ¿estás realmente dispuesto a permitir esto?”.
Hubo un silencio.
Fang Yuchen se apresuró a continuar: “Además, Jin Fengchen no ama a tu hermana en absoluto. A quien ama es a Sese. Algún día recuperará la memoria y seguro que no dejará escapar a tu hermana”.
Quedo en silencio.
Fang Yuchen no tenía prisa y esperó pacientemente una respuesta.
Después de un largo rato, volvió a oírse la voz de Shangguan Qian: “Ya no se puede parar, a menos que tengas una forma de sabotear el propio día de la boda”.
Fang Yuchen frunció el ceño cuando escuchó eso: “¿Cómo? Seguro que tienen un montón de guardias organizados para ese día. No sabemos si podremos entrar”.
“Conmigo allí, seguro que podrán entrar”.
“¿Será peligroso?”, preguntó Fang Yuchen.
La razón por la que preguntó esto era que estaba seguro de que Sese insistiría en ir con ellos.
“Es imposible que no haya ningún peligro, pero haré todo lo posible para que vuelvan sanos y salvos”.
Esta era la única opción ahora.
Fang Yuchen respiró profundamente y exhaló lentamente: “De acuerdo, haremos lo que dices”.
“La boda será el día 28, por favor prepara a tus hombres”.
Shangguan Qian colgó.
Fang Yuchen reflexionó por un momento y luego salió del estudio. Se acercó a la habitación de Jiang Sese, levantó la mano y llamó a la puerta.
“Sese, soy yo”.
La puerta se abrió y Jiang Sese salió: “¿Hay noticias?”.
Fang Yuchen asintió: “Sí”.
“Dime”, le pidió Jiang Sese apresuradamente.
“Shangguan Qian quiere que hagamos caos en el día de la boda”.
“¿Qué quieres decir?”. Jiang Sese no entendió.
“Vamos a estropear la boda”.
“Esto... ¿no es lo mismo que el plan de Gu Nian de simplemente agarrar a Fengchen?”. Jiang Sese no pensó que fuera diferente.
“Esta vez, tenemos la ayuda de Shangguan Qian, al menos será más seguro”.
Fang Yuchen realmente no quería ver a nadie herido.
Jiang Sese asintió: “Entonces se lo haré saber a Gu Nian. ¿Cuál es el plan?”.
“Tengo que planificar esto cuidadosamente. No podemos precipitarnos a la batalla sin estar preparados. Esta vez debemos traerlo de vuelta”.
“Gracias, primo”.
Sin su ayuda, estaría realmente perdida.
Fang Yuchen levantó su mano para frotar su cabeza y dijo con una sonrisa: “No tienes que ser cortés conmigo. Descansa”.
Jiang Sese asintió: “Buenas noches”.
Se dio la vuelta para volver a entrar en su habitación y cerró la puerta.
El coche se detuvo abajo de donde vivía Gu Nian. En cuanto bajó del coche, varios hombres se reunieron a su alrededor.
Jiang Sese los miró alarmado: “¿Qué quieren?”.
“Hay alguien que quiere verte”, dijo uno de los hombres.
“¿Quién?”. Una imagen de una persona pasó por la mente de Jiang Sese.
¿Podría ser él?
En ese momento, sonó su teléfono móvil.
Era un número desconocido.
Dudó antes de contestar. Una voz familiar dijo: “Sophia, ¿cómo estás?”.
Era Bo Gelian.
Si no es una cosa es otra.
No había resuelto el asunto de Fengchen y ahora Bo Gelian estaba aquí.
Jiang Sese respiró profundamente y preguntó con frialdad: “¿Qué quieres?”.
“¿No quieres saber dónde he estado todo este tiempo?”, preguntó Bo Gelian.
Jiang Sese se mofó: “No me interesan tus asuntos”.
Bo Gelian no se enfadó: “Quiero verte”.
“Está bien si quieres verme, pero ahora no es un buen momento”, dijo Jiang Sese con frialdad mientras miraba a la gente que la rodeaba.
Ella tenía cosas más importantes que hacer ahora, y no tenía tiempo para ver a Bo Gelian.
“¿Cuándo?”, preguntó Bo Gelian.
“Cuando esté de buen humor”.
Su respuesta hizo que Bo Gelian se riera a carcajadas.
Jiang Sese sintió un escalofrío al escuchar la risa de Bo Gelian por teléfono. Su mano sosteniendo el teléfono se tensó inconscientemente.
Al cabo de un rato, la risa se calmó y se volvió a oír la voz de Bo Gelian: “Quiero verte ahora”.
En cuanto terminó de hablar, los hombres la agarraron inmediatamente por los brazos.
“¡Déjenme ir!”. Jiang Sese se puso pálida de miedo.
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