Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 1292

La boda terminó en caos.

Jiang Sese fue enviada al hospital. Recibió un puñetazo en la nuca, pero no era grave.

Se desmayó porque sus emociones habían sido inestables durante los últimos días y por la falta de sueño, lo que hizo que su cuerpo se debilitara.

“No es nada preocupante, pero la paciente necesita descansar unos días”.

Fang Yuchen asintió apresuradamente tras escuchar las instrucciones del médico. “Muy bien, le prestaré más atención”.

Después de que el doctor se fuera, Fang Yuchen se dirigió a la cabecera de la cama. Sus ojos se posaron en el pálido rostro de Jiang Sese y un suspiro escapó de sus labios.

Si Jin Fengchen no se le devolvía, ¿cómo podría descansar?

“Joven Amo Yuchen, ¿qué hacemos ahora?”, preguntó Gu Nian, que estaba parado al lado.

Esto era algo que no habían esperado.

Después de todo esto, ahora sería aún más difícil para ellos sacar a Jin Fengchen de la residencia Shangguan.

Fang Yuchen reflexionó por un momento antes de decir: “No tenemos más opciones. Solo podemos continuar con tu plan inicial”.

Gu Nian frunció el ceño. “¿Estás seguro?”.

“No es cuestión de estar seguro o no. En la situación actual de Sese, no creo que se pueda retrasar más”.

Gu Nian comprendió lo que quería decir. “Muy bien. Ya sé lo que hay que hacer”.

“Debes tener cuidado”, exhortó Fang Yuchen.

Gu Nian se rio ligeramente. “No te preocupes por esto. Fui entrenado por el Joven Amo. Estaré bien”.

Después de hablar, asintió ligeramente hacia Fang Yuchen, luego se dio la vuelta y se fue.

La sala volvió a quedar en silencio.

Fang Yuchen respiró profundamente y exhaló lentamente.

La boda quedó como una farsa, y al mismo tiempo, la familia Shangguan se había convertido en una broma.

La Vieja Señora casi se desmaya de la ira. Mientras tanto, Shangguan Yuan se despertó de camino a casa.

En cuanto entró en la casa, subió directamente a su dormitorio.

La Vieja Señora suspiró, llamó a Shangguan Qian y lo reprendió. “¿En qué estabas pensando? Sabías que la otra parte vendría a causar problemas, ¡y aun así los dejaste hacerlo! ¡Es tu hermana!”.

“¡Lo siento, Abuela!” Shangguan Qian bajó la cabeza.

Las cosas se intensificaron hasta ese punto y solo pudo disculparse.

La Vieja Señora suspiró fuertemente. “¿Todavía le guardas rencor a Yuanyuan? ¿Por qué ayudaste a los extraños?”.

“Para nada, Abuela”.

Por muy mal que Shangguan Yuan lo tratara, nunca la había culpado.

“Entonces, ¿qué te pasa?”, preguntó la Vieja Señora.

Shangguan Qian guardó silencio por un momento, y luego dijo lentamente: “Abuela, sabes que me gusta Yuanyuan”.

La Vieja Señora frunció el ceño. “¿Y? ¿Arruinaste su felicidad, con eso tú crees que le gustaras?”.

Ante la pregunta de la Vieja Señora, Shangguan Qian optó por permanecer en silencio.

La Vieja Señora lo miró fijamente. Aunque estaba enfadada por lo que había hecho, no podía soportarlo al pensar en sus sentimientos por Yuanyuan.

Solo pudo suspirar de nuevo. “Pequeño Qian, ella no está destinada a estar contigo. No puedes forzarla”.

Al oír esto, Shangguan Qian sonrió burlonamente. “Abuela, ya que entiendes esto, ¿por qué aceptaste el matrimonio entre Yuanyuan y Jin Fengchen?”.

“Porque es la persona que le gusta a Yuanyuan”.

Sin embargo, inefablemente, Jin Fengchen no estaba preocupado por ella, pero por Jiang Sese.

La habían dejado inconsciente.

¿Cómo estaba ahora?

Vio cómo Fang Yuchen la cargaba al coche y la llevaba al hospital. No pudo controlarse y quiso seguirla.

Sin embargo, la Vieja Señora Shangguan ordenó a los hombres que lo detuvieran.

Pensando en esto, Jin Fengchen pidió suavemente: “¿Podría ayudarme a preguntar cómo está Jiang Sese?”.

Shangguan Qian levantó las cejas. “¿Estás preocupado por ella?”.

Jin Fengchen permaneció en silencio.

Shangguan Qian reflexionó durante un momento, y luego preguntó: “Dime sinceramente. ¿Recuerdas algo?”.

“No”. Jin Fengchen sacudió la cabeza. “Sigo sin recordar nada”.

“¿Entonces por qué salvaste a Jiang Sese?”.

“Fue...”. Jin Fengchen frunció el ceño. “Fue por instinto”.

Al escuchar la respuesta, Shangguan Qian se quedó atónita. ‘¿Instinto?’.

¿Podría ser que su amor por Jiang Sese era tan profundo que estuviera arraigado en sus huesos? ¿Incluso si su memoria se había ido, su cuerpo todavía lo recordaba?

“Entonces, ¿por eso decidiste posponer la boda?”.

“Sí”. Jin Fengchen dijo rotundamente. “Recuerda ayudarme a preguntar por Jiang Sese”.

A continuación, él se marchó.

Shangguan Qian se quedó mirando fijamente a su espalda y luego frunció el ceño.