Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 1414

Bajo la dirección de Shen Mubai, Xiaobao reveló todo lo que sufrió.

Hablando desde un lugar de ira, el rostro inmaduro de Xiaobao llevaba una pizca de crueldad.

Shen Mubai no pudo evitar sorprenderse, agradeciendo en secreto que Jin Fengchen lo descubrió cuando lo hizo. De lo contrario, el estado mental de Xiaobao seguramente se habría decaído.

Después de que Jin Fengchen se pusiera en contacto con él anoche, planeó una serie de tratamientos durante la noche.

Después de entender la situación real de Xiaobao, parecía que era mucho más grave de lo que pensaba.

Sin embargo, basándose en su capacidad profesional, confiaba en poder tratarlo.

Después de una hora y media, Shen Mubai y Xiaobao salieron de la habitación uno tras otro.

“Xiaobao, la sesión de hoy era para conocer tu estado, y tendremos otras sesiones de tratamiento más adelante. Debes ser puntual, ¿entendido?”.

“De acuerdo”. Xiaobao no pareció resistirse.

Esto hizo que Shen Mubai se sintiera muy satisfecho.

“Toma asiento, llamaré a tu tío y le pediré que venga a recogerte”.

Xiaobao se dirigió obedientemente al sofá de al lado, se sentó y esperó a que Jin Fengyao lo recogiera.

Unos veinte minutos después, Jin Fengyao se apresuró a venir.

“¿Cómo les fue?”, preguntó ansioso en cuanto vio a Shen Mubai.

Shen Mubai miró a Xiaobao y sonrió ligeramente. “Se considera que la situación no es tan grave. Habrá algunas sesiones de seguimiento, y veremos el efecto después”.

“Gracias”.

Solo él podía tratar a Xiaobao ahora.

“Intenta que esté de buen humor cuando vuelvas, y no dejes que vea nada que pueda ser molesto”, dijo Shen Mubai.

Jin Fengyao asintió apresuradamente. “No te preocupes. Haremos lo que dices”.

Shen Mubai sonrió y se dirigió a Xiaobao para decirle: “Xiaobao, solo dile a tu padre y a tu madre si te encuentras con algún problema. No te lo guardes, porque si no sería malo para tu salud”.

“Entendido”.

Xiaobao asintió. Sin embargo, aún no se sabía si lo haría realmente.

Después de dejar el lugar de trabajo, Jin Fengyao envió a Xiaobao a la escuela.

Por el camino, Jin Fengyao giraba la cabeza para mirar a Xiaobao de vez en cuando.

El hecho era que, si no hubiera sido porque su hermano le dijo que había un problema de salud mental con Xiaobao, realmente no podría saberlo.

Xiaobao era el mismo de siempre y no le pasaba nada.

Xiaobao notó su mirada y giró la cabeza. “Tío, ¿tengo algo en la cara?”.

Jin Fengyao se sorprendió. Luego reaccionó, sonriendo, y respondió: “No”.

Xiaobao bajó la cabeza. “Tío, siento haberte hecho preocupar”.

Jin Fengyao escuchó la culpa en su repentina disculpa y estiró la mano para frotarle la cabeza. “Acuérdate decírselo a tu padre y a tu madre cuando tengas algún problema en el futuro. Solo entonces, no vamos a preocuparnos”.

“De acuerdo”.

“Bien”. Jin Fengyao sonrió y le alborotó el pelo.

“¡Tío!”. Xiaobao lo miró con insatisfacción y levantó la mano para alisarse el pelo.

Jin Fengyao se rio alegremente.

...

Jin Fengchen volvió a la oficina después de su reunión y vio a Jiang Sese apoyando la barbilla en las manos. Parecía aturdida y parecía estar soñando despierta.

¡Toc, toc!

Golpeó ligeramente la mesa.

Jiang Sese volvió de inmediato a la realidad. Vio que era él y sonrió sin poder evitarlo. “¿Qué haces?”.

“¿En qué piensas?”. Jin Fengchen apoyó las manos en el borde de la mesa, se inclinó y la miró a los ojos brillantes.

Odiaba la crueldad de Jin Fengchen, pero odiaba aún más a Jiang Sese.

Si no hubiera sido por la aparición de Jiang Sese, ya estaría casada con Jin Fengchen y tendrían varios hijos.

En cuanto recordó el pasado, el sentimiento de desesperación la golpeó en la cara y la envolvió inmediatamente.

¡Jin Fengchen!

¡Jiang Sese!

Su Qingyin apretó los puños. Su rostro, delicadamente maquillado, se cubrió de una neblina, y el odio en sus ojos casi se desbordó.

¡Debe hacerles pagar por lo que han hecho!

Crimmings entró en la habitación, muy consciente de la fuerte aura de odio que emanaba de ella.

Sus ojos parpadearon mientras se acercaba y la abrazaba por la espalda.

El aliento familiar la envolvió, y el ánimo de Su Qingyin se calmó lentamente. Tomó la mano de Crimmings y preguntó suavemente: “¿Cómo va todo?”.

“Todo va bien. Sin embargo, lo extraño es que el Grupo Jin no hecho ningún movimiento por el momento”. Un rastro de hostilidad apareció en los ojos de Crimmings.

El Grupo Shangguan ya le arrebató algunos de los negocios del Grupo Jin, pero ellos seguían siendo indiferentes.

Esto hizo que uno se preguntara si el Grupo Jin escondía algo grande bajo la manga.

“No es que sean indiferentes, sino que no tienen intención”. Su Qingyin apartó su mano y se dio la vuelta. Le miró y dijo: “Jin Fengchen está en deuda con la familia Shangguan, así que no tomará medidas por el momento”.

Crimmings frunció el ceño. “No creo que sea tan sencillo”.

Jin Fengchen era demasiado astuto. Tenía que estar más atento, no fuera a ser que cometiera un error y se echara a perder todo lo que había trabajado.

“Es bueno estar atento, pero...”.

“¿Pero qué?”, preguntó Crimmings.

Su Qingyin guardó silencio durante un rato, y luego dijo lentamente: “Ahora mismo, hay algo en lo que necesito tu ayuda”.

Crimmings la sujetó por la cintura y la acercó a él. Su mirada se paseó por sus labios rojos ligeramente abiertos. “¿Necesitas preguntar? Cualquier cosa que necesites que haga, solo dime”.