Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 1432

Con la desaparición de Tiantian, el ambiente en la residencia Jin era bastante sombrío.

“¿Quién se llevó a Tiantian?”. La Señora Jin dijo mientras se secaba las lágrimas: “Tiantian aún es tan pequeña, si algo malo ocurre, ya no quiero vivir”.

“¿De qué hablas?”. El Amo Jin la regañó con rabia: “¿Cómo puede pasarle algo a Tiantian? ¡La policía la encontrará pronto!”.

“Sí, Mamá, no pienses así, Tiantian estará bien”. Song Qingwan la consoló.

La Señora Jin se atragantó y dijo: “Ahora Sese se desmayó y está en el hospital. Si Tiantian no se encuentra de nuevo, me temo que su cuerpo no podrá soportarlo”.

“Mamá, eso no ocurrirá”. Song Qingwan le acarició ligeramente la espalda, suspiró y dijo: “¿Por qué no podemos tener días tranquilos?”.

El asunto de Shangguan Yuan finalmente se calmó después de grandes dificultades, y algo más pasó…

Al oír esto, la Señora Jin se secó las lágrimas y dijo: “Cuando Tiantian vuelva, tendré que pedir un amuleto de paz para cada uno de ustedes”.

Song Qingwan rio sin poder evitarlo: “Mamá, ¿por qué sigues creyendo esas cosas?”.

“Es mejor confiar en ello, que no confiar en nada”.

Independientemente de si el amuleto de la paz podía realmente mantenerlos a salvo, al menos era psicológicamente reconfortante.

“Bien, ya no llores, deja que la cocina haga un poco de sopa y la lleve al hospital para Sese”. El Amo Jin frunció el ceño, su humor no era muy bueno.

En estos días, el Grupo Jin era blanco del Grupo Shangguan y de varias otras empresas, y por fin ganaron un importante proyecto en el extranjero, para que algo así sucediera.

Al Amo Jin le resultaba difícil no relacionar ambas cosas.

En cuanto Fengchen ganó el proyecto, Tiantian desapareció.

¿Cómo podía existir tal coincidencia?

El Amo Jin lo pensó, al igual que Jin Fengchen y Jin Fengyao.

“Hermano, envié a alguien a vigilar a Shangguan Qian y a los demás, y nos informarán si tienen alguna noticia sobre Tiantian”. Dijo Jin Fengyao mientras miraba a Jin Fengchen que estaba sentado junto a la cama del hospital.

Jin Fengchen miró el rostro ligeramente pálido de Jiang Sese, con los ojos llenos de angustia.

Le apretó la mano y se culpó a sí mismo: “Todo es mi culpa por estar ocupado con el trabajo estos días y descuidar a mi mujer y a mis hijos”.

“Hermano, no te pongas así, no es tu culpa”.

Jin Fengyao se acercó, levantó su mano y la puso suavemente sobre su hombro, sus ojos se entrecerraron, revelando una mirada aguda: “Si esto realmente tiene algo que ver con Shangguan Qian y los demás, definitivamente no los dejaré escapar”.

“¿Cómo la policía les ha ido?”. Preguntó Jin Fengchen.

“Aún no la encuentran”. Jin Fengyao frunció el ceño profundamente. “Comprobé todas las cámaras de vigilancia cerca del jardín de infancia, y era extraño que no hubiera ninguna señal de Tiantian”.

“Vuelve a revisar, la gente no puede desaparecer en el aire”.

Jin Fengyao asintió: “De acuerdo”.

...

Cuando Fang Yuchen se enteró de que Tiantian desapareció, envió inmediatamente a alguien a la Ciudad Jin para que ayudara a encontrarla.

Llamó a Jin Fengchen: “Primo, si hay algo en lo que necesites ayuda, por favor, habla, no seas tímido”.

“Gracias”. Jin Fengchen no sabía qué más decir además de agradecerle.

“Somos familia. No hay que ser tan formales”.

Después de colgar el teléfono, Jin Fengchen sujetó el teléfono y se quedó un rato junto a la ventana antes de darse la vuelta.

Cuando Jiang Sese se despertó, abrió los ojos y vio una deslumbrante luz blanca, y todos los recuerdos de antes de caer inconsciente volvieron a su mente.

Su corazón se tensó y se incorporó rápidamente.

Jin Fengchen se dio la vuelta, la vio sentada y se apresuró a acercarse.

“Sese”.

“Fengchen, ¿encontraron a Tiantian?”. Jiang Sese lo miró fijamente y le preguntó con impaciencia.

Jin Fengchen bajó los ojos: “Todavía no”.

“¿Todavía?”. Jiang Sese se mostró incrédula. “¿Cómo es posible que aún no la hayan encontrado? Me estás mintiendo, ¿verdad?”.

Jin Fengchen la sujetó por los hombros y la calmó suavemente: “Sese, cálmate primero. No han encontrado a Tiantian. La policía sigue buscándola. Yo también envié a alguien a buscarla. Creo que Tiantian será encontrada pronto”.

“¿Pronto?”. Jiang Sese estaba un poco fuera de control. “¿Qué tan pronto es pronto? Estuve inconsciente durante mucho tiempo, y aún no la encuentran. ¿Cómo puedo creer en tus palabras?”.

Mientras hablaba, las lágrimas brotaban de sus ojos.

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