Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 1458

“De acuerdo”.

Gu Nian sacó su teléfono móvil y se preparó para llamar a la policía. En ese momento, Jin Fengchen continuó: “Prepara una carta de abogado y demanda a Tecnologías Jinxu para salvaguardar los derechos e intereses legales de la empresa”.

“Sí”.

Gu Nian se apresuró a marcharse.

En cuanto la policía abrió el caso, envió inmediatamente gente a investigar. Según las pistas proporcionadas por Gu Nian, encontraron la residencia de Li Mingzhe.

Inesperadamente, estaba vacía.

Li Mingzhe parecía haberlos visto venir y ya había escapado.

Al oír esta noticia, el rostro de Gu Nian se ensombreció.

Reprendió a su subordinado antes de informar del asunto a Jin Fengchen.

“Joven Amo, es una negligencia mía. No me aseguré de que lo vigilaran bien”. Gu Nian asumió la responsabilidad.

Aunque sus subordinados se quedaran dormidos en el trabajo, seguía siendo su responsabilidad.

“Sigan buscando. Necesitamos a Li Mingzhe como testigo”, ordenó Jin Fengchen con voz profunda.

Gu Nian asintió: “Entendido”.

...

“¿De qué hablas? ¿Li Mingzhe se escapó?”. Jin Fengyao miró a Jin Fengchen con incredulidad.

“La policía fue a su residencia y descubrió que no estaba allí. Solo después de preguntar a los vecinos se enteraron de que mudó durante la noche”.

Jin Fengyao frunció el ceño: “¿Encontraron a su mujer?”.

Jin Fengchen dijo con rostro tranquilo: “¿Qué crees?”.

“Entonces, ¿qué dijo su mujer?”. Jin Fengyao volvió a preguntar.

“Ella no sabe nada”.

“¡M*ldita sea!”. Jin Fengyao no pudo evitar maldecir: “Nunca maltratamos a ningún empleado, ¿por qué tenemos que lidiar con un problema así?”.

No había expresión en el rostro de Jin Fengchen, sus cejas estaban fuertemente fruncidas.

“Hermano, nunca debes dejar ir a Song Huayang”. Jin Fengyao estaba enojado. “¡Robar secretos comerciales con este tipo de truco, debería ir a la cárcel!”.

“No lo haré”. Jin Fengchen entrecerró los ojos, y había una mirada oscura en sus ojos. “El mercado nacional no está tranquilo ahora mismo, y nuestra situación será aún más difícil”.

Al oír eso, Jin Fengyao se preocupó: “Entonces, ¿qué debemos hacer? Desde que Crimmings y el Grupo JR regresaron a China, todo se volvió gradualmente extraño”.

Jinxu Technology era solo una pequeña empresa. ¿Cómo podía Song Huayang atreverse a ser hostil con el Grupo Jin?

¡Esto era realmente extraño!

Jin Fengyao no era el único que sentía que aquello era extraño. Jin Fengchen también pensaba lo mismo.

Lo que estaba ocurriendo ahora podía ser solo el principio.

El Grupo Jin iba a enfrentarse a tormentas aún mayores.

Pensando en esto, Jin Fengchen dijo: “Fengyao, debes ir en persona a nuestros importantes socios comerciales y tranquilizarlos. Debemos estabilizar los otros proyectos”.

Jin Fengyao asintió: “De acuerdo, ya sé qué hacer”.

...

Li Mingzhe se escondió en un pequeño hotel. No salió en absoluto, y solo vivía de las entregas.

Llamó a su mujer.

En cuanto contestó, le gritó: “Bastante malo es que andes apostando, como para además vender secretos comerciales de la empresa a otras compañías. Li Mingzhe, eres realmente especial”.

“Cariño, lo siento, solo quería pagar las deudas. Yo...”.

“No quiero escuchar nada de ti. De todos modos, ¡el divorcio es definitivo!”.

Ella colgó.

Li Mingzhe se recostó en la cama con la desesperación en su rostro.

Tomó un montón de dinero de Song Huayang, pero no podía ver ninguna salida. Una vez que saliera, seguro que lo atraparía la policía, que lo estaba buscando por toda la ciudad.

No quería ir a la cárcel...

En ese momento, llamaron a la puerta de repente.

Li Mingzhe se sorprendió y se levantó rápidamente de la cama.

“¿Quién es?”, preguntó en voz alta.

“Entrega”.

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