Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 1484

El Amo Jin y la Señora Jin también se quedaron en la Capital. Hicieron turismo durante el día y solo volvieron a casa por la noche.

Toda la familia cenaba junta, y era muy agradable.

Jiang Sese esperaba vivir así todos los días, pero sabía que no podía quedarse en la Capital por mucho tiempo.

Después de pasar unos días con el Viejo Amo Fang, decidió llevar a sus dos hijos de vuelta a la Ciudad Jin.

Estos días, aunque se quedaba en la Capital, siempre estaba preocupada por las cosas en la Ciudad Jin.

Le preocupaba que Jin Fengchen no comiera a tiempo y se quedara hasta tarde trabajando sin ella.

Por eso quería volver y cuidar de él.

Además, seguía siendo su secretaria. En su ausencia, la otra secretaria trabajaría más. No podía estar ausente mucho tiempo.

El Viejo Fang se sentía muy reacio, pero no la obligó a quedarse. Solo le dijo que se cuidara.

“Abuelo, vendré a menudo a verte. Si nos echas de menos a mí y a los niños, puedes llamarnos por videollamada”.

“De acuerdo, lo entiendo”.

Viendo cómo se alejaba el coche, la sonrisa del Viejo Fang se desvaneció lentamente. Su expresión se volvió solitaria.

“Papá, cuando estés bien, te llevaré a la Ciudad Jin para que los veas”. Fang Xueman se inclinó y dijo suavemente.

El Viejo Amo Fang solo sonrió. “Claro”.

Jiang Sese volvió a la residencia Jin, solo Song Qingwan estaba allí.

Song Qingwan se sorprendió al verla a ella y a los niños de vuelta. “Cuñada, ¿por qué no jugaste unos días más?”.

Jiang Sese sonrió y no dio ninguna respuesta.

Song Qingwan comprendió de repente por su sonrisa y no pudo evitar reírse. “Estás preocupada por Fengchen”.

“¿Están todos en la oficina?”. Preguntó Jiang Sese en respuesta.

“Sí, Fengchen y Fengyao siguen en la oficina”.

“Tía, ¿no tienes miedo de estar sola en casa?”. Preguntó Tiantian con cariño.

“Para nada”. Song Qingwan le tocó la cabecita y continuó: “¿No hay un ama de llaves y un abuelo?”.

Tiantian cayó en la cuenta de repente. “Sí”.

En ese momento, el ama de llaves se acercó y dijo con una sonrisa: “Señora, usted volvió”.

Jiang Sese sonrió: “Sí, así es. Por favor, pídele a alguien que me ayude a subir mi equipaje”.

“Sí”.

El ama de llaves llamó al sirviente, y juntos subieron el equipaje.

“Cuñada, ¿tienes hambre? Dejaré que la cocina te prepare algo para comer”.

Diciendo eso, Song Qingwan se volvió para llamar a los sirvientes.

“Hazlo por Xiaobao y Tiantian, no necesito una porción”. Dijo Jiang Sese.

“¿Ah?”. Song Qingwan la miró desconcertada.

“Me voy a la oficina”.

Entonces, Jiang Sese se volvió hacia Xiaobao y le dijo: “Cuida bien de tu hermana, ¿está bien?”.

Xiaobao asintió con sensatez. “De acuerdo”.

“Tiantian, pórtate bien y no hagas un escándalo”. Jiang Sese volvió a decir a Tiantian.

Tiantian frunció la boca, y actuó como si fuera una adulta mientras decía: “Mami, ya no soy una niña, así que no haré ningún ruido”.

Song Qingwan sonrió. “Cuñada, puedes estar segura de que los vigilaré”.

“Siento las molestias”. Jiang Sese la miró agradecida.

“No es ninguna molestia, conduce despacio y presta atención a tu seguridad”.

Jiang Sese le sonrió, se dio la vuelta y se alejó a toda prisa.

Al ver su figura desaparecer en la puerta de su casa, Song Qingwan no pudo evitar reírse y suspiró: “La relación entre la cuñada y el hermano mayor es realmente buena”.

...

Cuando llegó el ascensor y se abrió la puerta, Jiang Sese salió sin dudar y se sintió aliviada en secreto.

Justo ahora, en el ascensor, Li Xi estaba detrás de ella, y sus ojos eran tan intensos que era difícil ignorarla.

Por ello, su corazón estaba siempre inquieto.

Realmente no quería estar más a solas con Li Xi.

Gu Nian vio a Jiang Sese y se sorprendió muy gratamente, pero cuando vio a Li Xi, la alegría de su rostro se desvaneció ligeramente.

Al ver esto, Li Xi levantó las cejas. “Parece que el Asistente Gu no me da la bienvenida”.

“No, no”. Gu Nian llevaba muchos años cerca de Jin Fengchen, y aprendió la habilidad de decir las cosas adecuadas para la ocasión.

Tenía una sonrisa adecuada en su rostro. “Es que no esperaba que nos visitara tan repentinamente. Por favor, no me haga sufrir”.

“Eres el asistente especial del presidente Jin. ¿Cómo podría atreverme a hacerte sufrir?”.

Li Xi dijo esto con una sonrisa, pero Jiang Sese y Gu Nian reconocieron la burla en sus palabras.

Gu Nian lo ignoró con calma y dijo: “Puedo pedirle a la Presidenta Li que espere primero en la sala de conferencias. Yo iré a hablar con el Presidente Jin”.

Tras decir esto, pidió a la secretaria que llevara a Li Xi a la sala de conferencias.

Gu Nian entró en el despacho del Presidente con Jiang Sese.

“¿Por qué de repente volviste?”. Jin Fengchen se sorprendió al ver a Jiang Sese.

Pensó que se quedaría en la Capital unos días más, pero no esperaba que volviera hoy.

“¿Sorprendido?”. Preguntó Jiang Sese con una sonrisa.

Jin Fengchen no pudo evitar reírse. “Sorprendido, pero aún así muy contento”.

“Presidente, sé que es un bonito reencuentro, pero ahora hay cosas más importantes”. Dijo Gu Nian en voz alta.

“¿Qué pasa?”. Preguntó Jin Fengchen.

Sin esperar a que Gu Nian respondiera, Jiang Sese contestó: “Li Xi está aquí”.