Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 1516

Al día siguiente, después de que Jiang Sese enviara a Jin Fengchen a trabajar, se preparó para ir al patio trasero a regar las flores.

Debido al alboroto que Yao Yao montó en la oficina recientemente, Jin Fengchen le dijo que descansara en casa durante unos días y que solo volviera cuando las cosas se calmaran.

Acababa de coger la regadera cuando de repente sonó su teléfono.

Era un número desconocido, y ella rechazó la llamada inmediatamente.

Sin embargo, la persona que llamaba era persistente y seguía llamando.

Exasperada, Jiang Sese solo pudo contestar: “Hola”.

“Sophia. Cuánto tiempo sin verte”.

La voz familiar de Bo Gelian se oía por el altavoz. Jiang Sese terminó casi instintivamente la llamada.

Sujetó el teléfono con fuerza en la mano, con el pánico creciendo en su rostro.

¿Por qué Bo Gelian la llamaría?

No solo eso, ¿por qué tenía Bo Gelian su número?

¿Qué estaba tramando ahora?

Acababa de pensar esto cuando su teléfono volvió a sonar.

Jiang Sese sujetó el teléfono con fuerza y miró el número que aparecía en la pantalla.

Lo odie o lo tema, al final el destino venía por todos. Escapar no solucionaría ningún problema.

Respiró profundamente y cogió el teléfono: “¿Qué quieres?”.

“Ah”.

Bo Gelian se rio en voz baja, lo que puso los pelos de punta a Jiang Sese. Agarró con fuerza el teléfono y repitió su pregunta: “¿Qué quieres?”.

Ella ha pasado por tanto para volver a tener una cierta sensación de normalidad en su vida, ¿por qué volvía a aparecer él?

¡Realmente se estaba volviendo loca!

“Me gustaría verte”.

Tan pronto como Bo Gelian habló, Jiang Sese se negó inmediatamente: “¡No quiero verte!”.

¡El daño que le causó a ella y a su familia la hizo no querer verlo nunca más!

No importaba con quién lo comparara, él siempre sería la persona más peligrosa.

Cuando Jiang Sese pensó en esto, inmediatamente quiso colgar.

En ese momento, Bo Gelian dijo al otro lado de la línea: “Puede que tenga pruebas que limpien el nombre del Grupo Jin”.

En cuanto Jiang Sese escuchó eso, inconscientemente dejó de respirar.

Entonces dijo: “Mientras vengas a verme, te entregaré todas las pruebas”.

Jiang Sese abrió la boca para aceptar. Sin embargo, se le ocurrió una idea: ¿y si todo esto era una estrategia para hacerla salir?

Ella se rio fríamente: “¿Cómo puedo saber si lo que dices es verdad o mentira?”.

Bo Gelian se mostró indiferente ante su pregunta: “Alguien planeó todo lo que le pasó al Grupo Jin”.

“De acuerdo, iré a verte”.

Esta vez, Jiang Sese no dudó.

Esto se debió a que todo lo que dijo coincidía con la hipótesis de Jin Fengchen. Además, solo lo diría si supiera quién era el autor intelectual.

Mientras pudiera ayudar al Grupo Jin y a Fengchen, asumiría cualquier tipo de riesgo.

Jiang Sese se levantó y se cambió, y luego bajó las escaleras a toda prisa.

La Señora Jin vio la mirada apresurada de su rostro y preguntó preocupada: “Sese, ¿a dónde te vas?”.

“Mamá, voy a ver a alguien. Volveré pronto”.

Tras decir esto, Jiang Sese salió por la puerta.

La Señora Jin no pudo evitar fruncir el ceño: “¿A quién tiene tanto apuro por ver?”.

...

Jiang Sese se dirigió al lugar del que habló Bo Gelian. Era una cafetería muy bien decorada.

Nada más entrar, una camarera la saludó con entusiasmo: “Bienvenida”.

Jiang Sese le sonrió y preguntó: “¿Hay un cliente extranjero aquí?”.

“Sí, está sentado arriba”.

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