Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 1535

Jiang Sese volvió a su habitación. Se sentó en el borde de la cama, pensando en el aspecto tierno de Tiantian, que acababa de acosarla para que le contara más historias, y su corazón no pudo evitar ablandarse.

También pensó en Xiaobao, que se estaba volviendo más independiente y sensible.

Hasta hoy se dio cuenta de que Xiaobao se volvió tan maduro inconscientemente, y solo entonces se dio cuenta de que el tiempo vuela.

Aún recordaba cuando lo conoció en la empresa. Era como un pequeño bollo, pero ahora era como un hombrecito.

No quería que creciera tan rápido.

Se resistía a ver a Xiaobao más maduro que sus compañeros. De este modo, perdería parte de la felicidad de la infancia.

Jin Fengchen empujó la puerta y vio a Jiang Sese sentada junto a la cama.

Caminó hacia ella ligeramente.

Ella seguía inmersa en sus pensamientos y no se dio cuenta de que Jin Fengchen entraba.

“Sese”, llamó Jin Fengchen en voz baja.

Una voz familiar sonó en sus oídos. Jiang Sese recobró el sentido y levantó la cabeza. Cuando lo vio, no pudo evitar sonreír.

“Estás en casa”.

Jin Fengchen gruñó. “Mmm”. Luego preguntó: “¿En qué estabas pensando? Estabas muy sumida en tus pensamientos”.

Jiang Sese respiró profundamente. “No es nada. De repente me sentí muy emotiva. Desde el último incidente, Xiaobao se volvió mucho más sensible, como si...”.

Sonaba decepcionada. “Él parece haber madurado bastante”.

Aunque Xiaobao siempre fue un niño sensato, ahora no solo era sensato, sino que su temperamento era completamente como el de un adulto.

Jin Fengchen acarició suavemente su suave pelo, sonrió y dijo: “¿No es eso algo bueno?”.

Jiang Sese sacudió la cabeza. “No es bueno en absoluto”.

“¿Por qué?”.

“Me sigue gustando lo apegado que es conmigo. No quiero que crezca tan rápido”.

Jiang Sese no podía explicar este sentimiento, era como si fuera a perder lo que apreció durante mucho tiempo.

Jin Fengchen sonrió y sus cejas se suavizaron.

“Los niños tienen que crecer. Se irán de casa y nos dejarán en el futuro”. Miró fijamente a Jiang Sese con ternura.

En ese momento, Jiang Sese se sintió un poco triste. “No quiero que Xiaobao y Tiantian nos dejen. Realmente no podría soportarlo”.

“Tendrán que irse a estudiar y a trabajar. No pueden quedarse con nosotros para siempre, tontita”. Jin Fengchen la cogió en brazos con una leve sonrisa en la comisura de los labios.

“Pero me sigo sintiendo renuente”. Jiang Sese apoyó la cabeza en su pecho, su voz sonaba muy decepcionada.

“Después de todo, son nuestros hijos. Aunque se vayan lejos, volverán”. Jin Fengchen la soltó y miró sus ojos claros. “Pero antes de eso, deben gozar de buena salud...”.

Jiang Sese frunció los labios y luego sonrió. “Sí, lo sé”.

“Encontraré la forma de eliminar el patógeno de tu cuerpo lo antes posible”. Jin Fengchen volvió a abrazarla con fuerza. “Te lo prometo, Sese”.

Jiang Sese se abrazó a su cintura. “Te creo”.

...

Aunque Jiang Sese lo trató mal, Bo Gelian no se enfadó. En cambio, se puso en contacto con los investigadores del anterior laboratorio de investigación para salvarla.

No podía quedarse brazos cruzados y ver morir a Jiang Sese.

Su estado físico actual era completamente inadecuado para el embarazo. Sin embargo, respetó su decisión. Si ella insistía en quedarse con el niño, él encontraría la manera de salvarla a ella y al niño.

En los últimos días, Bo Gelian intentó reunirse de nuevo con Jiang Sese, pero ella no salió de la residencia Jin desde entonces.

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