Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 1549

Cuando Su Qingyin vio las noticias, también entró en pánico.

Llamó rápidamente a Crimmings, pero no importaba cuántas veces llamara, no podía contactarlo.

Sostuvo su teléfono móvil con fuerza en la mano. Viendo que la situación en China era tan mala, ¿cómo podría resolver el problema actual?

¡No podía quedarse sentada y esperar!

Por lo tanto, llamó a varios subordinados que Crimmings dejó en el país.

“¿Dijo algo antes de irse al extranjero?”. Su Qingyin los miró fijamente y preguntó.

Los subordinados sacudieron la cabeza y dijeron que no.

“¿Habrá otra forma para contactarse con él?”. Les preguntó.

“Por el momento no podemos contactar con él”.

Estaban en la misma situación que Su Qingyin, no podían contactar con Crimmings.

Su Qingyin tenía una mirada solemne mientras pensaba en ello. “Haremos esto entonces. Yo también iré al extranjero. Mantenga un ojo en la situación doméstica y avísenme tan pronto como haya cualquier noticia”.

“Sí”.

Después de que Su Qingyin llegara al extranjero, se dio cuenta de que las cosas eran mucho más graves de lo que pensaba.

...

El Grupo Shangguan estaba implicado porque invirtió en el proyecto de Crimmings, y sus acciones también estaban en crisis.

Como resultado, algunos socios retiraron sus fondos para esperar y ver, y muchos proyectos que se negociaron en un principio se estancaron.

“¿Todos ustedes son basura? Si ni siquiera puedo conseguir que tranquilicen a los clientes, ¡para qué sirven!”.

Shangguan Qian tiró un documento al suelo. Levantó la mano para ajustarse la corbata mientras señalaba con un dedo a la fila de subordinados que tenía delante. Los regañó furiosamente.

Los subordinados bajaron la cabeza. No se atrevían a respirar.

“Miren las acciones del grupo, ¿en qué estado nos encontramos ahora mismo? ¿Aún no tienen una solución?”.

Todavía nadie dijo nada.

Shangguan sonrió con rabia, se dirigió directamente a uno de ellos, lo agarró por la corbata y le gritó: “¡Habla! ¿No se te da bien manejar las crisis de relaciones públicas?”.

“Señor Presidente, yo...”.

El hombre abrió la boca débilmente, con el cuerpo temblando por el nerviosismo.

Al ver esto, Shangguan Qian lo hizo a un lado y respiró profundamente: “Les doy a todos ustedes instrucciones para que me den una solución lo antes posible. Además, tranquilicen a los clientes por mí. No quiero oír nada más acerca de clientes que llamen para poner en pausa sus proyectos con nosotros. ¿Me entendieron?”.

“Sí”.

Al ver que seguían parados ahí, Shangguan Qian volvió a gritar: “¡Salgan de aquí si lo entendieron!”.

Todos salieron corriendo.

“¿Pudiste contactar a Crimmings?”. Shangguan Qian preguntó a su asistente que estaba parado a un lado y constantemente en el teléfono.

El asistente colgó el móvil y sacudió la cabeza.

“¡Sigue intentándolo! ¡Hasta que lo consigas!”. Shangguan Qian se arrancó la corbata y la arrojó sobre su escritorio, con un rostro aterradoramente oscuro.

Después de que el asistente saliera, Shangguan Qian suspiró y frunció el ceño con fuerza.

Si Crimmings cae, su vida será aún más difícil.

En el Grupo Jin.

Gu Nian entró rápidamente en la oficina del presidente. “Joven Amo, Crimmings está movilizando fondos para salvar su empresa”.

“¿Es así?”. Había una sonrisa en la cara de Jin Fengchen, como si esperaba todo esto.

Crimmings estaba pasando ahora por sus últimas luchas. Aunque consiguiera salvar la empresa, no sería tan poderosa como antes.

“Transfirió todos los fondos nacionales a la sede central, pero no es suficiente por el momento”.

Ying Tian había estado vigilando todos los movimientos de Crimmings, e informando de cada novedad a Gu Nian, que a su vez informaba a Jin Fengchen.

Jin Fengchen asintió, se quedó pensativo durante un rato y luego habló despacio: “A continuación, Crimmings podría ser incapaz de resistir la presión y transferir el proyecto que tiene entre manos”.

Cuando Gu Nian oyó esto, preguntó: “Joven Amo, ¿quiere...?”.

Los ojos de Jin Fengchen eran profundos y ordenados. “Dile a Ying Tian que lo vigile. Cuando lo ponga a la venta, lo compraremos a un precio bajo. Aunque no es nada notable, todavía hay varios proyectos buenos en la empresa”.

Los ojos de Jin Fengchen se entrecerraron ligeramente, y su boca mostraba una mueca de desprecio. Una vez que esos buenos proyectos fueran vendidos por Crimmings, su empresa no sería nada.

Gu Nian asintió: “De acuerdo, se lo diré a Ying Tian”.

Esta vez actuaron con el máximo secreto. Shangguan Qian y los demás no sospecharon en absoluto del Grupo Jin.

Gu Nian pensó: ‘Es realmente diferente cuando el jefe entra en acción’.