Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 1554

Carl se estrelló contra la pared y al segundo siguiente se desplomó en el suelo.

Se levantó con dificultad, extremadamente adolorido, y se precipitó de nuevo hacia Jin Fengchen.

He Shuhan se apresuró a detenerlo, y los dos hombres lucharon.

Por otro lado, la ofensiva de Jin Fengchen era cada vez más rápida, y se volvía más y más implacable en su ofensiva contra Bo Gelian.

Bo Gelian se vio gradualmente abrumado, y recibió varios puñetazos en la cara y el cuerpo.

Los golpes de Jin Fengchen venían con intención asesina, su cara estaba un poco pálida de dolor.

En ese momento, Jin Fengchen era como un demonio, había un aire frío a su alrededor.

Aunque él mismo fuera despiadado, incluso Bo Gelian se sintió asustado.

Sentía claramente que Jin Fengchen realmente lo quería muerto.

Bo Gelian perdió la concentración ante ese pensamiento, su pecho fue pateado fuertemente por Jin Fengchen, y cayó al suelo.

¡Dolor!

Bo Gelian respiró profundamente y tuvo que levantarse con las dos manos y los pies. Jin Fengchen se movió más rápido y le pisó la espalda.

Le pisó tan fuerte que Bo Gelian gimió de dolor.

Jin Fengchen lo miró con frialdad, observando su expresión de dolor.

¡No era suficiente!

¡Era poco!

Le hizo demasiado daño a Sese.

Al pensar en esto, los ojos de Jin Fengchen brillaron con una mirada maliciosa, y cogió la silla que estaba a su lado y la estrelló contra Bo Gelian.

La pupila de Bo Gelian se contrajo al instante, y levantó la mano inconscientemente para bloquearla.

“Ah-”.

La silla lo golpeó con fuerza, y sólo se pudo escuchar un claro “crujido”. El brazo de Bo Gelian se rompió, y gritó de dolor.

La cara de Bo Gelian estaba blanca como el papel por el dolor, y su frente estaba cubierta de sudor.

“¡Espero que puedas soportar esta pequeña lección, porque aún tengo muchas formas de torturarte!”.

Las palabras de Jin Fengchen eran tan frías como la nieve del invierno cayendo desde arriba.

“¡Atrévete!”. Bo Gelian lo miró fijamente de forma sombría.

Los ojos de Jin Fengchen se volvieron afilados, y levantó su pierna y pisó su mano rota.

“¡Ah!”, gritó Bo Gelian.

Jin Fengchen esbozó una sonrisa sedienta de sangre: “Bo Gelian, ¿en serio crees que no me atrevo? Cuando fui capaz de obligar a tu organización a casi disolverse, ¡puedo hacerlo de nuevo!”.

“Será mejor que no desafíes mi línea de advertencia”.

“¡Jin Fengchen, no te dejaré ir!”. Los ojos de Bo Gelian estaban rojos y gritó con fuerza.

Jin Fengchen se rio, y molió su mano con su pie.

“¡Ah!”. Bo Gelian volvió a gritar.

“Vive bien ahora, no te quedan muchos días así”.

Jin Fengchen dio un paso atrás: “Hoy es este brazo. Considéralo intereses por acercarte a mi mujer y a mi hija. La próxima vez, ¿lo intentarás?”.

Tras la advertencia, Jin Fengchen echó a Bo Gelian como si fuera una patada basura.

Bo Gelian estaba pálido y empapado de sudor por el dolor.

He Shuhan tenía a Carl bajo control y un escalofrío recorrió su columna vertebral después de ver el lado cruel de Jin Fengchen.

El Joven Amo era más cruel que antes después de recuperar sus recuerdos.

Jiang Sese, naturalmente, se apoyó en él y se aferró a él.

El corazón de Jin Fengchen se ablandó al instante.

Agarró la cintura de Jiang Sese, la tomó entre sus brazos, inclinó la cabeza y la besó.

Jiang Sese se despertó por la mañana y se encontró en los brazos de Jin Fengchen, y su corazón estaba lleno.

Durante este tiempo, él estaba muy ocupado. A veces, cuando se despertaba por la mañana, él no estaba, e incluso la colcha estaba fría.

Al pensar en esto, cerraba los ojos y respiraba su aroma, que la envolvía por completo.

Se sintió cálida y a gusto.

Jin Fengchen abrió los ojos y sacó una leve sonrisa de su boca.

“Sese, levántate”. Le apretó suavemente las orejas.

Jiang Sese abrió los ojos de inmediato y sonrió a sus tiernos ojos. “Me desperté hace mucho tiempo”.

“¿Por qué no te levantas?”.

“Tenía miedo de despertarte”.

Jin Fengchen sonrió. “Se está haciendo tarde. Es hora de despertarse”.

“¿No volviste tarde anoche?”. Jiang Sese levantó la mano y acarició su apuesto rostro. “Estás muy ocupado estos días y no pudiste descansar bien. Me temo que tu cuerpo no podrá soportarlo”.

Jin Fengchen le cogió la mano, se la puso en la boca y la besó suavemente. “No te preocupes, no soy tan frágil”.

En ese momento, la puerta se abrió desde el exterior.

“¡Mami!”. Era Tiantian.

Jiang Sese se apresuró a salir de la cama, se puso en cuclillas y levantó a Tiantian que venía corriendo.