Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 20

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Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma por Internet

Jiang Sese se sintió incómoda por todas las miradas, especialmente considerando la mirada sugerente en sus ojos. Para su vergüenza, sus mejillas se calentaron y la hicieron sentir aún más incómoda. "No, no, estoy aquí para ver a Xiaobao".

"¿Ah? ¿Xiaobao? ¿Por qué lo estás buscando?"

La sonrisa de Jin Fengyao vaciló instantáneamente y su expresión se llenó de decepción.

Jiang Sese no esperaba tal reacción de él. Preguntó vacilante: "¿Qué pasa? ¿No puedo buscar a Xiaobao?"

Jin Fengyao agitó la mano. "Nah. Xiaobao está con mis padres ahora. No podrás verlo ahora."

Hizo una pausa por un momento antes de recuperar su sonrisa. Esta vez, su sonrisa se parecía a la de un lobo. "¡Pero si estás aquí por mi hermano, está desocupado!"

¡Incluso si su hermano no estuviera desocupado, estaba seguro de que él haría que pareciera estar libre!

Silenciosamente agregó eso en su mente.

Jiang Sese no pudo evitar dudar. Tenía la sensación de que el Segundo Joven Amo de la familia Jin estaba mintiendo entre dientes.

Seguramente, un hombre como Jin Fengchen tendría mil cosas que atender cada día, tan ocupado que no tendría tiempo para comer.

¿Cómo puede estar desocupado?

No parecía correcto que ella lo molestara por una razón como esta.

Sin embargo, recordó su promesa a Xiaobao de que le ofrecería una celebración de cumpleaños inolvidable. Ahora que la despidieron, al menos tenía que informarle.

Como Xiaobao no estaba cerca, no tuvo más remedio que decírselo a su padre.

Pensando en esto, Jiang Sese abrió la boca para decir: "Um, si no hay problema, también es lo mismo para mí ver al Sr. Jin".

"¡Por supuesto que no hay problema! ¿Cómo puedes molestarlo? Si eres tú, estoy seguro de que mi hermano no dirá una palabra al respecto..."

"¡Incluso podría estar muy feliz de ser molestado!"

Una vez que estuviera feliz, Jin Fengyao podría aprovechar la oportunidad de pedirle ese auto Maybach de concepto superior en su primera categoría con el que había estado soñando tenerlo en sus manos.

¡Solo piensa en lo moderno que se vería entonces!

Cuanto más pensaba en ello, más emocionado se volvía. También se puso muy ansioso por complacer cuando dijo: "Ven conmigo. Te llevaré con mi hermano".

Jiang Sese asintió. "Te estaré molestando entonces."

Jin Fengyao la llevó a la empresa, donde tomaron el ascensor privado de Jin Fengchen directamente hasta el piso deseado.

Actualmente, en el último piso del edificio, en la oficina del presidente...

Jin Fengchen se estaba enterrando en una gran pila de documentos, tan ocupado que no podía tomar un descanso.

De repente, alguien llamó a su puerta. Respondió sin levantar la vista: "Por favor, entre".

Jin Fengyao abrió la puerta y entró a la oficina con Jiang Sese detrás de él. Miró a su alrededor con curiosidad.

La oficina de Jin Fengchen tenía un estilo moderno con un diseño espacioso y un mobiliario sencillo que desprendía un profundo aire lujoso. La pared que miraba al sureste tenía ventanas francesas que dejaban entrar una gran cantidad de luz solar.

Allí de pie, se podía ver una vista que envolvía toda la ciudad.

Jiang Sese no pudo evitar suspirar por dentro. ¡Algo tan impresionante era de esperarse en la oficina del presidente del Grupo Jin!

Con tal pensamiento, movió su línea de visión y se volvió para mirar al hombre sentado detrás del escritorio.

Ella se quedó hechizada al verlo.

Jin Fengchen estaba vestido solo con una camisa blanca y una corbata suelta. Los primeros dos botones de su camisa estaban desabrochados, mostrando un indicio de su hermoso cuello. Su chaqueta de traje estaba inactiva en el respaldo de su silla. Llevaba las mangas arremangadas hasta la curva de los brazos. Anteojos de montura dorada descansaban en el puente de su alta nariz. Estaba revisando el documento que tenía en la mano con gran concentración. Aunque frío y distante, también exudaba el temperamento indescriptible de un erudito refinado.

Jiang Sese lo miró fijamente, hipnotizada. La frase "un hombre se ve mejor cuando está profundamente concentrado" apareció inexplicablemente en su mente.

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