Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 228

Resumo de Capítulo 228 Lo que trae ruina y vergüenza sobre él: Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma

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Un beso en la noche es especialmente fascinante.

Jiang Sese salió de su estado de trance cuando se dio cuenta de que Jin Fengchen estaba encima de ella.

Presionando sus manos sobre su duro pecho, trató de apartarlo.

Jin Fengchen se sentó, todavía perdido en el apasionado momento. Su mirada hacia ella era afectuosa, tolerante y llena de moderación. "Acuéstate”.

Él ya había abierto la puerta y salió de la habitación después de decir esas palabras. Oyó que la puerta de la habitación contigua se abría y luego se cerraba.

En la casa de la familia Su...

Su Qingyin se iba a la cama cuando recibió un mensaje de su amiga. Ella estalló y comenzó a destrozar todo en su habitación.

Había una mirada feroz en sus ojos. "¿Qué le pasa a Qin Mulan? Antes era toda 'eres la nuera perfecta que quiero', pero ha cambiado de tono así por así".

Si no hubiera sido por su amiga, no habría sabido que la Sra. Jin había llevado a otra mujer a una cita a ciegas con Jin Fengchen.

Después de escuchar el ruido proveniente de su habitación, su madre llegó apurada.

La Sra. Su preguntó con el ceño fruncido: "¿Qué estás haciendo?".

"Es la Tía Jin. Es una doble cara. Me repugna".

Después de escuchar de parte de Su Qingyin lo que había sucedido, la Sra. Su también se enojó.

Se quedó en silencio por un momento, y luego instó a su hija después de pensarlo un poco: "No saques conclusiones precipitadas todavía. Piensa primero en las intenciones que ella pueda tener".

Su Qingyin dio vueltas en la cama. Si no hubiera sido tan tarde en la noche, desearía poder tener alas y volar para ver a la Sra. Jin de inmediato.

Al día siguiente, cuando estaba en el trabajo, su mente seguía divagando. Cuando finalmente salió, corrió a la casa de la familia Jin con regalos.

Al ver que era Su Qingyin, Qin Mulan la saludó con una sonrisa.

Su Qingyin le dio a la Sra. Jin los regalos que trajo consigo. "Tía, estás más hermosa cada vez que te veo".

Qin Mulan parecía complacida de escuchar eso. Luego tomó las manos de Su Qingyin entre las suyas de una manera afectuosa. "Realmente no tienes que ser tan educada".

Después de una conversación informal, Su Qingyin aprovechó la oportunidad para preguntar: "Tía, escuché que llevaste a alguien a conocer a Fengchen".

A Qin Mulan no le sorprendió que Su Qingyin se hubiera enterado tan rápido. "Lo pensé mucho antes de hacerlo".

‘¿Que se supone que significa eso?’. Su Qingyin miró a la Sra. Jin.

"Jiang Sese está demasiado cerca de Fengchen y tuve que encontrar alguna forma de distraerlo".

Su Qingyin vio la luz cuando escuchó la explicación de Qin Mulan.

De esta manera, Jin Fengchen tendría que encontrarse con todas estas hijas de familias ricas todo el tiempo mientras se esforzaba por tratar con su madre. No podría concentrarse en Jiang Sese todo el día.

Al ver que Su Qingyin pensaba en la misma línea, Qin Mulan dijo con ojos parpadeantes: "Mira, al final, Fengchen probablemente elegirá una que considere la más apta".

Luego miró a Su Qingyin afirmativamente. "Ustedes dos son prácticamente amantes de la infancia. No hay duda de que Fengchen te elegirá".

Al escuchar la explicación de Qin Mulan, Su Qingyin se había olvidado por completo de la ira que había llevado allí.

"Siempre has sido la nuera ideal que yo quería". Esas palabras disiparon por completo la aprensión y la animosidad de Su Qingyin.

Su Qingyin se puso de pie y estaba lista para irse cuando Qin Mulan suspiró. "He hecho todas esas cosas sólo porque quiero que Fengchen sea feliz".

Su Qingyin dijo inmediatamente con voz sentimental: "Estoy segura de que Fengchen la entenderá al final".

Qin Mulan llevó a Su Qingyin hasta la puerta.

Después de regresar a casa, Su Qingyin se sentó y comenzó a repasar todo en su cabeza. Entonces se dio cuenta de lo poco confiable que era la promesa.

Lo que hizo Qin Mulan tenía un peligro oculto.

"¿Qué pasaría si Jin Fengchen realmente eligiera a una mujer al azar de entre las que le presentan?".

Las pupilas de Su Qingyin se contrajeron y ella se sintió abrumada por el agravio.

Preguntó solo después de terminar con el documento en el que estaba trabajando: "Entonces, ¿tienes alguna pregunta sobre tu trabajo?".

Su Qingyin malinterpretó y pensó que él se estaba preocupando por ella, e incluso sus ojos estaban sonriendo ahora. "Fengchen, con tu cuidadosa guía, ya no tengo más preguntas”.

"Eres más que capaz de manejar este trabajo y estás lista para trabajar de forma independiente. Con tu habilidad, el hacerte cargo del negocio de la familia Su no será un problema en absoluto", dijo Jin Fengchen sucintamente.

"¿Está reconociendo mi capacidad?".

Su Qingyin sintió como si nadara en miel.

Su reconocimiento la mantendría feliz durante mucho tiempo.

Jin Fengchen continuó con su voz indiferente: "Ya que eres tan excelente, realmente no hay nada más que pueda enseñarte aquí".

Su Qingyin aún no se había recuperado del deleite inicial y esas palabras la desconcertaron. ‘¿Qué se supone que significa eso?’.

"Hice que Gu Nian encontrara un reemplazo para ti. A partir de mañana, no tienes que volver a entrar". Después de decir esas palabras, Jin Fengchen volvió a su trabajo.

Su Qingyin abrió la boca, pero no pudo decir una palabra.

Ella no entendía por qué la echaría de la nada. Después de romperse la cabeza pensando, la única posibilidad en la que podía pensar era en Jiang Sese.

"¿Jiang Sese ha dicho algo sobre mí frente a él?".

La ira parpadeó en los ojos de Su Qingyin, pero ella la reprimió casi de inmediato.

Su máxima prioridad ahora era luchar por la oportunidad de quedarse. "Fengchen, todavía no tengo experiencia y necesito aprender mucho de ti".

"Eso no será necesario. Vuelve a casa. Nuestras empresas no operan de la misma manera".

Jin Fengchen respondió en tono afirmativo. Al ver la mirada indiferente en el rostro de él, ella se indignó aún más.

"Todavía tengo una reunión a la que ir". Jin Fengchen miró hacia abajo para comprobar la hora y luego salió de la oficina, ignorándola por completo.

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