Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 240

Al escuchar eso, Su Qingyin no podía evitar entrar en pánico.

¿Cómo se suponía que iba a saber cuál era la idea detrás de este plan de mercadeo?

Afortunadamente, ella había hecho su parte de la tarea, solo para estar segura.

No solo ella estudió este plan cuidadosamente, sino que también lo modificó levemente.

Su Qingyin se obligó a calmarse, entonces volvió su mirada hacia Kevin. "De hecho, estuve sorprendida cuando descubrí que tienen una línea de perfumes".

Kevin miró a Su Qingyin, no sorprendido por lo que dijo. Eso era cierto. Mucha gente había pensado erróneamente que el perfume de Eisley eran derivados de sus productos cosméticos.

Por lo tanto, ella no la interrumpió.

Su Qingyin sonrió a Jiang Sese de una manera complaciente y entonces continuó. "Los productos cosméticos de Eisley ya se han ganado una reputación, pero su perfume es mucho menos conocido. Sin embargo, tiene una base de clientes considerable. Creo que la promoción de los cosméticos aumentará las ventas del perfume también".

"¿Terminaste?". Jiang Sese se rio entre dientes.

Su Qingyin estaba molesta. Todavía no había terminado, pero Jiang Sese estaba muy ansiosa por interrumpirla. Ella se preguntó si Jiang Sese estaba comenzando a entrar en pánico, al ver que no le quedaba ninguna oportunidad.

Ese pensamiento le trajo una sonrisa de satisfacción en su rostro de nuevo.

Kevin no pudo evitar fruncir el ceño, disgustado por la grosera interrupción de Jiang Sese nuevamente. "Señorita Su, por favor, continúe".

Su Qingyin continuó hablando con compostura y confianza. "En realidad, el objetivo de nuestro plan es 'liderar uno con el otro'. Creo que a su compañía le gustaría ver que hay espacio para el crecimiento de su marca de perfumes.

"Eso es todo. Ya terminé". Después de eso, Su Qingyin le dio a Jiang Sese una mirada de provocación.

Pero Jiang Sese solo confirmó con una sonrisa, y entonces dijo: "Ya que la Señorita Su terminó con su actuación, me gustaría contarles a todos sobre la idea detrás de mi diseño".

Una vez que todo estaba listo, su plan se proyectó en la pantalla grande.

Todos en la habitación vieron de inmediato que su plan era casi idéntico al de Su Qingyin.

Kevin frunció el ceño involuntariamente e interrumpió a Jiang Sese. "¿Qué es esto?".

Su Qingyin dijo enojada: "¿Por qué preguntar? Es tan obvio que ha copiado mi plan de mercadeo".

Al escuchar lo que dijo, Jiang Sese solo sonrió con resignación.

Finalmente supo hoy que lo que querían decir con ‘un ladrón actúa como un policía’ y ‘mentir descaradamente’.

Ella se sintió intimidada, solo se tranquilizó porque era ella quien había plagiado su trabajo.

Jiang Sese le dio a Su Qingyin una mirada fría. "No saltemos a la conclusión de quién copió a quién".

Entonces ella se volvió hacia Kevin y le suplicó en tono afirmativo. "Kevin, todo lo que pido es un minuto para demostrar mi inocencia".

Kevin entonces se volvió hacia los ejecutivos que estaban a su lado y comenzaron a discutirlo entre ellos.

Después de una tranquila discusión, la gente de Eisley finalmente acordó darle a Jiang Sese la oportunidad que pidió.

Después de todo, ser acusado de plagio era lo suficientemente grave como para arruinar la vida de un planificador.

En nombre de Eisley, Kevin dijo en un tono serio: "Dado que tenemos dos planes de mercadeo idénticos aquí, uno de ellos tiene que ser plagiado. Para ser justos con ambas partes, te daremos una oportunidad".

Jiang Sese parecía agradecida. Ella asintió con la cabeza hacia Kevin, y luego comenzó a hablar con fluidez y de manera agradable.

Después de que ella se sentó, Kevin y los ejecutivos se pusieron de pie de inmediato y anunciaron a los demás: "Necesitaremos 10 minutos para discutirlo. Por favor, esperen aquí un momento mientras intentamos llegar a una conclusión".

Después de eso, ellos salieron rápidamente de la habitación.

Efectivamente, no hacía falta ser un genio para saber cuál era el plan plagiado.

Aunque los planos parecían idénticos, a juzgar por la idea fundamental, Jiang Sese era obviamente la diseñadora verdadera.

Por otro lado, Su Qingyin podría haber alterado el plan de mercadeo, pero como no entendía la idea detrás de él, el plan estaba lleno de lagunas.

No era nada comparado con la versión de Jiang Sese.

Ya que los anfitriones se habían ido, el resto de la multitud estaba discutiendo entre ellos.

Lanzaron miradas de desprecio a Su Qingyin, lo que la hacía sentir muy incómoda.

Con el rostro oscurecido, ella miró a Jiang Sese con malicia.

Su Qingyin ni siquiera podía soñar con encontrar un plan de mercadeo con tantas trampas.

"Esa mujer Jiang Sese. ¿Cree que no puede fallar ahora?", pensó Su Qingyin.

En el fondo, Su Qingyin se consideraba afortunada por haber llegado a un acuerdo con Kevin de antemano.

Ella sabía que mientras Kevin le diera ese contrato publicitario, sin importar cuán convincente fuera el discurso de Jiang Sese, ella se alejaría como la plagiaria.

Sin embargo, Jiang Sese no vio la mirada de regocijo en el rostro de Su Qingyin. Su rostro se había puesto pálido y sus manos no paraban de temblar.