Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 251

Su Qingyin finalmente volvió a sus sentidos cuando vio a Jin Fengchen corriendo por la pendiente.

Estaba tan aterrorizada que agarró el brazo de Wei Ziheng. "¿Qué hago? No quería que ella muriera...".

Wei Ziheng, sintiéndose nervioso y asustado, solo pudo consolarla un poco antes de llevarla de regreso al campamento.

Se tambalearon durante todo el viaje de regreso. Para cuando regresaron al campamento, ya estaban en un estado lamentable.

El resto del grupo de búsqueda también había regresado.

Suspiraron de alivio cuando vieron que Su Qingyin había regresado en una pieza.

Lo que importaba era que ella estuviera bien.

Para su sorpresa, Wei Ziheng ya estaba gritando incluso antes de acercarse: "¡Ha habido un terrible accidente! ¡La Señorita Jiang se cayó por una pendiente y el Presidente Jin fue tras ella!".

"¿Qué?".

Eso fue igual como una declaración de muerte.

Los jóvenes amos, que nunca se habían enfrentado a semejantes problemas, estaban muertos de miedo.

Escucharon a Wei Ziheng seguir diciendo: "Busquemos una cuerda. Debería ser útil".

Su idea era encontrar a los más fuertes entre ellos, atarlos con cuerdas y hacer que buscaran a Jiang Sese y Jin Fengchen a lo largo de la pendiente.

La conmoción llevó a Jin Fengyao a sacar a Xiaobao de su tienda.

Wei Ziheng repitió inmediatamente la noticia de que Jiang Sese se había caído por la pendiente.

Xiaobao rompió a llorar de miedo y Jin Fengyao estaba tan enojado que sus ojos se inyectaron en sangre. Gritó furiosamente: "¡Maldita sea! ¿Qué diablos pasó? ¿Cómo se cayó de repente?".

Wei Ziheng miró a Su Qingyin, pero no se atrevió a decir la verdad.

Ambos se quedaron callados, mientras que el resto no tuvo tiempo de interrogarlos más.

Un Jin Fengyao en pánico llevó a Xiaobao hacia la pendiente, cojeando en el camino.

Xiaobao estaba llorando tan fuerte que estaba jadeando por aire. "Tío, ¿mami morirá? No quiero que mami se muera...".

"Ella no morirá. Xiaobao, tu papá ya está en camino para salvar a tu mamá. Tienes que confiar en él". La mente de Jin Fengyao era un completo desastre. Aceleró el paso mientras trataba de consolar a Xiaobao.

Le dolía el pie, pero esa era la menor de sus preocupaciones ahora. Todo lo que quería era llegar al lugar del accidente lo más rápido posible.

Wei Ziheng, que ya estaba sobrio, estaba liderando el camino.

Un Joven Amo Li preocupado se acercó a Jin Fengyao y apoyó su brazo mientras este último caminaba. "Segundo Joven Amo, que no cunda el pánico. Todo estará bien".

Jin Fengyao hizo todo lo posible por mantener la calma. "Tiene razón; no puedo entrar en pánico. Necesito pensar en una manera de salvarlos lo antes posible".

...

Jiang Sese cayó directamente por la pendiente después de que Su Qingyin la empujara repentinamente.

Ella rodó por toda la pendiente, cortándose y raspándose su piel en el camino.

Dolió tanto que finalmente se sintió insensible. Hubo bastantes ocasiones en las que intentó agarrarse a algo, pero las únicas cosas alrededor eran hierbas, espinas y piedras, por lo que no había nada resistente a lo que agarrarse.

Casi había perdido la esperanza. Cuando ya había renunciado a la idea de sobrevivir a esta situación, se estrelló contra el suelo.

Su cabeza se estrelló contra las piedras de abajo, dejándola inconsciente.

La sangre se acumuló rápidamente bajó su cabeza, pintando un lienzo de rojo brillante.

Jin Fengchen estaba gritando su nombre mientras frenéticamente bajaba por la montaña.

Estaba envuelto en completa oscuridad, y estaba casi negro como boca de lobo mientras se precipitaba hacia abajo.

En un momento dado, no pudo ver el camino correctamente y tropezó. Cuando bajó la cabeza, vio un fragmento desgarrado de la ropa de Jiang Sese.

Sus ojos se iluminaron; debe estar en el camino correcto. Jiang Sese efectivamente se había caído aquí.

Jin Fengchen comenzó a seguir los fragmentos de tela.

Su corazón estaba retorcido por la ansiedad y la inquietud, ¡pero esperaba contra viento y marea que ella estuviera bien!

Agarró los fragmentos de tela en su mano, sintiendo una llama de furia ser reprimida en su corazón.