Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 272

Cuando Jin Fengchen regresó a casa y vio a Li Yuanyuan, sus ojos se oscurecieron y se dio la vuelta para irse.

Al ver esto, la expresión de Li Yuanyuan se volvió fea.

"Fengchen, ¿a dónde vas?". La Sra. Jin persiguió a su hijo.

Jin Fengchen ni siquiera le prestó atención a su madre y dijo fríamente: "A casa".

Jin Fengyao regresó en el momento en que llegaron a la puerta.

Miró a su hermano, confundido de por qué se iba. "Hermano, ¿a dónde vas?".

No respondió. Caminó alrededor de él y salió por la puerta.

Sin darse cuenta de lo que estaba pasando, Jin Fengyao detuvo a su madre para que no se fuera y le preguntó: "Mamá, ¿qué le pasa?".

"No me detengas".

La Sra. Jin apartó su mano y persiguió a Jin Fengchen; no tuvo tiempo de entretenerse con la pregunta de Jin Fengyao.

"¿Qué demonios está pasando?".

Él frunció el ceño, desconcertado.

Obtuvo su respuesta cuando entró en la casa y encontró a Li Yuanyuan en la sala de estar.

Parecía que su madre aún no había parado de buscar una mujer para su hermano.

Él apretó los labios. Una vez más su madre estaba buscando en vano.

"¡Alto ahí, Jin Fengchen!".

La Sra. Jin ya no era joven y no tardó mucho en quedarse sin aliento. Así que le gritó a su hijo que ya estaba a cierta distancia.

Jin Fengchen se quedó allí obedientemente.

La Sra. Jin se acercó rápidamente a él y lo miró con enojo. "Fengchen, ¿qué quieres decir con esto?".

Él no dijo nada.

La Sra. Jin respiró hondo, reprimiendo su ira y dijo pacientemente: "Hace tiempo que no comes con tu padre ni conmigo, por eso te llamé a casa".

Era cierto que había estado tan preocupado por la desaparición de Jiang Sese recientemente que había descuidado a sus padres y a su hijo.

Así que dijo: "Mamá, puedo acompañarlos a comer, pero no quiero a esa mujer cerca".

"Yuanyuan es mi invitada".

"¿Invitada?", se burló él. "Mamá, dejé claro que Jiang Sese es la única mujer que amaré en mi vida. No me voy a meter con nadie más".

El temperamento de la Sra. Jin estalló en el momento en que mencionó a Jiang Sese. "¡Jiang Sese otra vez! ¿Qué tiene de bueno esa mujer? ¿Es tan sobresaliente como Yuanyuan y Qingyin?".

Jin Fengchen la miró con una mirada pensativa y dijo, pronunciando cada palabra con claridad: "Para mí, es mejor que cualquier mujer de por ahí".

"¿Estás diciendo que puedes aceptar que ella dio a luz al hijo de otro hombre?".

Esto era algo que la Sra. Jin no podía aceptar. No importa cuán sobresaliente fuera, una mujer que una vez se casó y dio a luz no era una buena candidata para su hijo.

La familia Jin nunca aceptaría una nuera así.

"Mamá, no olvides que yo mismo tengo un hijo”.

"¡Eso es diferente!". La Sra. Jin se burló. "Eres un hombre. Ella es una mujer. ¿Cómo se pueden comparar?".

Él eligió soportar todo lo que ella dijo solo porque era su madre, pero ahora mismo, su tolerancia había llegado a su límite.

Cada oración que decía menospreciaba a Jiang Sese.

Sese era la única en su corazón. ¿Cómo podía permitir que alguien la menospreciara? No lo dejaría pasar, aunque esa persona fuera su madre.

"Mamá, tú también eres una mujer. ¿Cómo puedes discriminar a Sese de esta manera?".

"Yo...".

La Sra. Jin se quedó sin palabras. Al final, solo pudo repetir su opinión. "De cualquier manera, nunca aceptaré a esa mujer. Ella puede olvidarse de unirse a nuestra familia".

Jin Fengchen se burló. "Está bien. Si ella no puede unirse a nuestra familia, entonces yo seré el que se vaya".

La cara de la Sra. Jin se puso blanca. "¿Qué quieres decir?".

"Quiero decir exactamente lo que dije".

Jin Fengchen no quería continuar esta discusión con su madre, así que pasó delante de ella y se dirigió a su coche que estaba estacionado cerca.