Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 345

Al oír eso, Jin Fengchen no pudo evitar fruncir el ceño y preguntó: "¿A qué se debe esto?".

Jin Fengyao se recostó despreocupadamente en el sofá y dijo: "¿A qué crees que se debe? Piensa en todos los fondos y recursos humanos que hemos invertido en este proyecto en su fase inicial”.

"Además, una vez completado, este chip puede crear un impacto que causará una agitación económica en un pequeño país. Es natural que otras partes vayan detrás de él. De hecho, un equipo de personas se infiltró en nuestra base de investigación el mes pasado, pero mi cuñada fue ingresada en el hospital porque intentó salvar a Xiaobao, así que no te lo dije. No quería que te preocuparas”.

"Pero recientemente, esa gente se ha pasado de la raya. Nuestros hombres han sido heridos".

La mirada de Jin Fengchen se ensombreció un poco al oír esto, y preguntó fríamente: "¿Has averiguado quiénes eran esas personas?".

Jin Fengyao asintió. "Uno de ellos es una mafia italiana conocida como el 'Huracán' y el otro es el Grupo Stephen, un consorcio extranjero. Parece que se han aliado".

Tras escuchar esta información, Jin Fengchen entrecerró los ojos, emanando un aire peligroso.

Lentamente, se puso en pie y fue a situarse junto a la ventana. La luna brillaba a su espalda, parecía un implacable dios de la muerte.

Incluso desde cierta distancia, Jin Fengyao podía sentir el aire frío que desprendía Jin Fengchen. Sabía que su hermano estaba realmente enfadado esta vez.

Después de un largo rato, la sensación de frío aún permanecía en el aire. Jin Fengchen dijo lentamente: "Tienen agallas para intentar meterse conmigo de esta manera".

"¿Qué debemos hacer ahora?".

Jin Fengyao volvió a trabajar como segundo al mando al dejarle todas las grandes decisiones a su hermano y pedir la opinión de este para todo.

"Ve a decirle a Lan Si que es imperativo que mantenga la información a salvo; que separe al personal si es necesario. Una vez completado el chip, envíalo cuanto antes, por si las otras partes llegan a él", instruyó Jin Fengchen con frialdad.

Jin Fengyao asintió. Estaba a punto de marcharse cuando le advirtió a su hermano. "Han pasado muchas cosas últimamente. Aparte de esos dos grupos, estoy seguro de que también nos vigilan otras personas”.

"Me temo que alguien podría haber intentado acercarse a ti y a mí, así que ten mucho cuidado estos días, sobre todo por la seguridad de mi cuñada y Xiaobao”.

Jin Fengchen asintió a eso. Él también estaba pensando en eso.

Cuando miró hacia abajo, vio la pierna herida de Jin Fengyao, y dijo: "Organizaré un equipo de protección para ellos. Ten cuidado estos días".

"No te preocupes, hermano; mi herida no es nada. ¿Qué podría pasarle a un hombre adulto como yo?".

Acariciando su pierna con una sonrisa, Jin Fengyao salió cojeando de la habitación.

Después de que su hermano se marchara, Jin Fengchen marcó el número de Gu Nian, diciéndole que enviara algunos hombres para mantener a Jiang Sese y Xiaobao a salvo.

De alguna manera, Jin Fengchen se sintió agitado tras la llamada telefónica, así que encendió un cigarrillo.

No había fumado ni una sola vez desde que él y Jiang Sese volvieron a estar juntos, pues temía que a Jiang Sese no le gustara el olor.

En ese momento, llamaron a la puerta y la voz de Jiang Sese sonó desde el otro lado. "Fengchen, ¿puedo entrar? Te traje algo de fruta".

Al oír su voz, Jin Fengchen apagó apresuradamente su cigarrillo y abrió la ventana para deshacerse del olor. Después, fue a abrir la puerta él mismo.

Jiang Sese entró en el estudio y dejó la fruta. Pudo percibir el leve olor a cigarrillo en el aire.

Ella sabía que Jin Fengchen solo fumaba cuando estaba molesto. Esto significaba que él estaba lidiando con algunos problemas difíciles.

Se volteó hacia él, le rodeó con sus brazos y le dijo con su voz suave: "Fengchen, pase lo que pase, estoy aquí para ti. Así que no te presiones demasiado".

Jin Fengchen no pudo evitar sentirse conmovido al darse cuenta de que ella se preocupaba por él. La rodeó con sus brazos.

Después de algunas caricias, Jiang Sese bostezó y sintió sueño.