Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 402

Jin Fengchen pasó despreocupadamente sus dedos por el pelo de Jiang Sese y dijo con rotundidad: "El culpable no fue otro que su querido yerno. Lan Sichen siempre ha sido una persona ambiciosa".

"Ha estado devorando la fortuna de la familia Jiang. Estos días, el Grupo Jiang ha sido casi completamente devorado por el Grupo Lan".

"¿Pero no son Lan Sichen y Jiang Nuannuan una pareja amorosa? ¿Cómo pudo ocurrir algo así?", preguntó Jiang Sese, aturdida.

Jin Fengchen no pudo evitar darle una palmadita en la cabeza después de ver su expresión ingenua. "¿Crees que es una persona tan simple? Es de los que logran su objetivo en el mundo de los negocios a toda costa. El Grupo Jiang está en las últimas ahora".

Sus palabras molestaron a Jiang Sese.

Aunque había cortado su relación con su familia, la empresa seguía siendo un negocio que su madre había construido con Jiang Zhen. Ella no podía aceptar el hecho de que la empresa terminara en manos de Lan Sichen.

Se lo guardó para sí misma. Después de todo, esto era entre las familias Jiang y Lan y no tenía nada que ver con ella, así que era mejor que se mantuviera al margen.

Siguieron charlando hasta que se quedó dormida en los brazos de él.

El ambiente no era tan armonioso en la casa de la familia Jiang. Después de ser rechazado en el hospital, Jiang Zhen se fue a casa resentido.

Shen Shulan y Jiang Nuannuan lo rodearon en cuanto entró en la casa. Shen Shulan le preguntó: "¿Cómo te fue? ¿Jiang Sese aceptó ayudarnos?".

Jiang Zhen se quitó el abrigo con irritación y dijo con desazón: "No me dio ni la hora e incluso me regañó en el hospital. Me ha humillado por completo".

Shen Shulan comenzó a reprender a Jiang Sese. "Esa mujer nos está dejando colgados ahora que ha llegado a la cima. Al fin y al cabo seguimos siendo familia, pero ella aun así está siendo tan despiadada".

Jiang Nuannuan se hizo eco de las palabras de su madre. "¡Exactamente! ¿Quién se cree que es? ¿Por qué finge ser virtuosa? Realmente no sé qué ve Jin Fengchen en ella".

Un ya molesto Jiang Zhen montó en cólera después de oírlas parlotear sin parar a su lado.

"¡Crac!". Resonó el sonido de un cristal rompiéndose. Shen Shulan y su hija se callaron inmediatamente y miraron al enfadado Jiang Zhen.

"¡Suficiente! Si no fuera por ustedes dos, ¿creen que ella se hubiera vuelto así? ¡La culpa es suya por causar tantos problemas y empujarla hasta este punto! ¡Ahora no escucha a ninguno de nosotros! ¿Es esto lo que querían?", rugió Jiang Zhen.

Cuando vio a Shen Shulan abrazando a Jiang Nuannuan de forma protectora, se enfadó aún más. Señaló a Jiang Nuannuan y gritó: "¡Y tú! ¡Tú eres peor! ¡Ni siquiera puedes vigilar a tu hombre!".

"¡Lan Sichen se va a casar con la señorita Lin en vez de contigo! ¡Ahora no tienes nada! ¡No solo eres inútil, sino que incluso me has hecho perder mi empresa! ¡Tienes muy mala suerte!".

Después de una perorata, Jiang Zhen movió sus brazos exasperados y se fue.

Jiang Nuannuan se sintió tan agraviada después de recibir la reprimenda de su padre que berreó en el abrazo de su madre. "¡No dejaré que Lan Sichen se salga con la suya por haberme traicionado! ¡Juro que le devolveré la humillación por partida doble!".

Shen Shulan se sintió angustiada al mirarla. "Nuannuan, eres una buena chica. Ese bastardo no sabe apreciarte. Nos vengaremos y lo haremos pagar por esto".

"Le enseñaremos las consecuencias de hacernos enfadar. Nuannuan, no te preocupes. Mientras yo esté cerca, no dejaré que nadie te haga daño".

"Mamá, eres la mejor. Todo lo que hace papá estos días es regañarme. Creo que ahora quiere adular a Jiang Sese", dijo Jiang Nuannuan con resentimiento.

"Lo sé. Jiang Sese es igual que su madre; las dos son unas miserables que solo saben ligar con los hombres. Ahora que la necesitamos, se está portando mal", dijo Shen Shulan haciendo eco de las palabras de su hija.

Jin Fengyao se asustó al ver sus lágrimas. Intentó darle un pañuelo, pero tiró accidentalmente de sus heridas. El dolor le hizo hacer una mueca.

Song Qingwan dejó de llorar inmediatamente y se acercó para comprobar su estado y volver a aplicar la pomada en sus heridas.

"¿Estás bien?".

"¿Cómo voy a estar bien? ¿Por qué no lo pruebas tú misma?", replicó Jin Fengyao con disgusto.

Él impidió que ella bajara la cabeza inmediatamente. "Ya basta. Concéntrate en cuidar de mí. Una vez que me haya recuperado lo suficiente como para salir del hospital, te daré el salario que te he prometido y todo quedará claro entre nosotros."

"No sé si estoy predestinado con este hospital o simplemente sufro mala suerte cada vez que te veo". Hacia el final, Jin Fengyao no pudo evitar burlarse de ella.

Song Qingwan no dijo nada.

Por la tarde, cuando Jin Fengchen se fue a trabajar, Jiang Sese se sintió tan aburrida que buscó noticias del Grupo Jiang en Internet. La situación era mucho peor de lo que había imaginado.

Lan Sichen había cazado furtivamente a los trabajadores veteranos del Grupo Jiang, incluso a los que eran cercanos a Jiang Zhen. En esos días, el Grupo Jiang era como un cascarón vacío.

Las noticias en línea hicieron que Jiang Sese frunciera el ceño. "¿Acaso Lan Sichen salía conmigo en ese entonces para conseguir la fortuna de la familia Jiang?".

Un escalofrío recorrió su columna vertebral después de pensar en esta posibilidad.

Afortunadamente, ya no tenía nada que ver con Lan Sichen; de lo contrario, ella sería la que estuviera sufriendo en ese momento.